Se estima que, cada año, 46 millones de mujeres alrededor del mundo recurren al aborto inducido para terminar con un embarazo no deseado, según información de la Campaña 28 de septiembre, Día por la Despenalización del Aborto en América Latina y El Caribe.
La penalización del aborto trae como consecuencia el aborto inseguro o clandestino, llevado a cabo en situación de riesgo, condiciones higiénicas insuficientes y sin personal adecuado que proteja la vida de las mujeres. Las enfermedades y la muerte relacionadas con el aborto están directamente vinculadas con la pobreza, el bajo nivel de instrucción y el parto de varios hijos, entre otras causas.
Debido a este problema de salud mundial, el 28 de septiembre fuera declarado Día por la Despenalización del Aborto en América Latina y del Caribe durante el V Encuentro Feminista Latinoamericano y del Caribe realizado en San Bernardo, Argentina, en noviembre del 1990.
Actualmente, de todas las mujeres que se someten a un aborto en condiciones de riesgo en el mundo, entre 10 y 50 de cada cien necesitan atención médica para el tratamiento de las complicaciones que se producen posteriormente.
Asimismo, cada año 4.2 millones de mujeres se practican abortos en América Latina y el Caribe, la mayoría en condiciones de riesgo y de forma clandestina, según cifras de la Organización Mundial de Salud (OMS).
En este contexto, con la Campaña 28 de septiembre se quiere lograr que la sociedad, en especial los gobiernos de la región, entiendan que la penalización condena a las mujeres con mayores dificultades para ejercer sus derechos por no tener acceso a educación, información, atención de salud, recursos económicos e institucionales.
LAS MEXICANAS
De acuerdo con datos del Consejo Nacional de Población (Conapo), en México el aborto representa la cuarta causa de muerte entre mujeres en edad reproductiva. Cada año, la institución registra más de 100 mil abortos inducidos.
Sin embargo, la ilegalidad del aborto en nuestro país provoca un importante subregistro, por lo que el Instituto Alan Guttmacher estima que en realidad se producen 533 mil 100 abortos inducidos al año, cifra que según cálculos de diversas organizaciones civiles puede elevarse hasta 850 mil casos anuales, señala, Católicas por el Derecho a Decidir.
Un aborto en México es aceptado legalmente cuando es por violación, accidente, malformación o inseminación artificial no consentida; cuando el parto pone en riesgo la vida de la madre o cuando el embarazo provocar un gran daño a la salud de la mujer; también se admite si la mujer tiene razones económicas para interrumpir el embarazo y ya es madre al menos de tres hijos.
Cada estado de la República Mexicana tiene sus propias leyes en relación con el aborto. De las razones mencionadas, solamente la primera, por violación, es válida legalmente en todo el territorio nacional. 29 estados contemplan en sus leyes el aborto imprudencial; 28 admiten la interrupción cuando el embarazo pone en riesgo la vida de la mujer; siete lo aprueban por inseminación artificial no deseada y solamente Yucatán lo permite por motivos socioeconómicos.
En el marco del Día por la Despenalización del Aborto en América Latina y el Caribe, mañana se llevarán a cabo diversas actividades en México, como el panel interactivo Acceso al aborto legal: avances y desafíos en el DF, que se realizará de 10:30 a 14:00 horas en el Claustro de Sor Juana.
De igual forma, mañana a las 18:30 horas se efectuará la presentación para el público general del video No estás sola, en Cinemanía Plaza Loreto. El video, realizado por iniciativa de Catholics for a Free Choice en colaboración con Católicas por el Derecho a Decidir México, tiene como objetivo llamar la atención acerca del grave problema de salud pública y justicia social que constituye el aborto seguro en la región.
05/GT/YT
