En México se han establecido las bases para promover mejoras en la condición y calidad de vida de las mujeres, sin embargo la población femenina todavía sufre algún tipo de violencia y desconoce sus derechos humanos, aseguró hoy la secretaría ejecutiva del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), María Elena Álvarez.
En el foro Simulación de un Juicio de Derechos Humanos de las Mujeres, realizado en el auditorio «Héctor Fix Zamudio» de la Facultad de Derecho en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), señaló que la violencia es un problema complejo que tiene raíces de índole cultural.
«Es importante que las mujeres conozcan, amplíen y refuercen sus conocimientos en derechos humanos relativos a ellas y se den cuentan de los abusos que se comenten en su contra», añadió la funcionaria en el foro organizado por Inmujeres para la población estudiantil femenina.
Destacó los mecanismos de protección, tanto nacionales como internacionales, que México ha suscrito y se comprometido a no permitir ninguna violación de los derechos humanos de las mujeres. Sin embargo, los impartidores y procuradores de justicia no conocen esos documentos, añadió.
Con esto «intentamos hacer visible la realidad que viven las mujeres en nuestro país respecto al ejercicio de sus derechos humanos, este ejercicio es una herramienta de apoyo a la formación de los futuros abogadas y abogados para que se pueda dar una protección equitativa y justa a los derechos humanos de las mujeres».
Para el Inmujeres las actividades de capacitación y sensibilización y educación no son las únicas formas, pero si las eficaces para modificar esta cultura y poder equilibrar en términos de equidad la relaciones entre hombres y mujeres, dijo.
A la población estudiantil que forma parte de una generación de juristas les dijo que tienen la oportunidad de integrar la perspectiva de género en la profesión, ya sea como futuros abogados, abogadas, jueces o juezas.
El desarrollo de sus capacidades resulta indispensable para garantizar esa igualdad de oportunidades, enfatizó.
Este juicio dedicado a mejorar el conocimiento para la incorporación de la perspectiva de género en el Derecho, debe tener eco y ser incorporado en la educación superior como materia obligatoria, y que los nuevos jueces se gradúen con los conocimientos y valores que los lleven a ser verdaderamente defensores de los derechos humanos, por igual de mujeres y hombres.
2004/RGL/LR
