La familia de la abogada Digna Ochoa y Plácido, encontrada muerta el 19 de octubre de 2001, advirtió hoy que recurrirá al amparo si la Fiscalía Especial para el caso se pronuncia por el suicidio, ya que aseguró, la defensora de los derechos humanos fue asesinada.
El nuevo representante legal de la familia Ochoa y Plácido, José Antonio Becerril González, rechazó hoy en conferencia de prensa que Digna se haya disparado en tres ocasiones y dio a conocer la estrategia que seguirá para llegar a la verdad.
Becerril González, advirtió que si la Fiscalía se pronuncia infundadamente por la hipótesis del suicidio y pretende archivar el caso, interpondrá los medios de defensa que la ley le concede a las víctimas u ofendidas, incluyendo el juicio de amparo.
Los peritos, dijo, ofrecerán las pruebas necesarias para acreditar que la abogada defensora de los derechos humanos, Ochoa y Placido, no se suicidó. «Es ilógico que un suicida haga tres disparos, uno en contra de un sillón, otro que lo lesiona y finalmente un tercero que lo priva de la vida», resaltó.
El abogado resaltó que han sido contratados, con el único fin de aportar elementos de prueba para demostrar que Digna su asesinada. «No podemos hacer ninguna afirmación respecto de probables responsables, porque esa sería una segunda etapa de investigación».
Para demostrar que se trató de un homicidio, informó que pidió a la fiscal especial del caso, Margarita Guerra, permita a peritos, contratados por la defensa, acceso a los datos de la averiguación previa que requieran, concediéndoles todas las facilidades necesarias para practicar los exámenes necesarios a fin de fundamentar su peritaje.
En materia forense y de criminalistica fueron nombrados como peritos los doctores Carlos Morales González y Hugo Reyes Rodríguez, respectivamente y en química forense, Fernando Lara Pastrana, «todos ellos expertos en el campo de la investigación criminal», destacó.
Becerril González, integrante de la Barra de Abogados, llegó a esa conclusión luego de estudiar las constancias que integran la investigación ministerial, de la que se derivan diversos datos que generan serias dudas respecto a la hipótesis del suicidio.
Algunas de ellas, reveló, es que no se detectaron residuos de disparos de arma de fuego en las manos de Ocha y Placido, ni en los guantes colocados en sus extremidades, «siendo que se le atribuye haber disparado una pistola en tres ocasiones».
Afirmó que Ochoa y Placido presentó heridas producidas por proyectil de arma de fuego. Una fue en el muslo izquierdo y otra en el cráneo, la primera con un trayecto de derecha a izquierda y la segunda con una dirección de izquierda a derecha, «lo que implicaría el absurdo de que primero se disparó con la mano derecha y después con la izquierda, siendo que ella era diestra».
Así, esta coadyuvancia tendrá una participación más activa en el caso, para demostrar que fue un homicidio, «pues si no se demuestra este hecho, no podemos hablar de presuntos responsables».
Nuestra labor es de colaboración y no de obstrucción que desempeña la Fiscalía Especial, pues está sigue con el deber de seguir investigando.
En tanto, Jesús Ochoa y Placido, hermano de Digna, dio a conocer que la Fiscalía sólo se ha dedicado a investigar a su familia y se insiste en la hipótesis del suicidio, a la que consideró aberrante.
Asimismo, reveló que hasta el momento desconoce los resultados de los peritos internacionales, pues Pedro Díaz, contratado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, no ha entregado su informe.
Jesús Ochoa informó ayer lunes que este martes daría a conocer varios documentos en apoyo de las pesquisas, sin embargo éstos no fueron entregados a los medios de comunicación.
2003/RGL/MEL
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