El maltrato infantil es uno de los flagelos que más lastiman, pero, «desafortunadamente, uno de los más invisibles». Se da en todas las clases sociales y forma parte de la «cultura educativa» de nuestro país que tiene lugar en el entorno privado, lo que dificulta su atención.
Así lo afirmó la diputada perredista Angélica de la Peña, presidenta de la Comisión Especial de la Niñez, Adolescencia y Familia, quien mencionó la importancia de analizar las repercusiones del maltrato físico o emocional a fin de dr una rspuesta desde el ámbito jurídico.
En el marco del foro El maltrato infantil desde el punto de vista de la ciencia médica, realizado en la Cámara de Diputados, la legisladora aseguró que la violencia física o emocional contra la niñez denigra los derechos humanos.
De su lado, la diputada Tatiana Clouthier se pronunció por romper el patrón del autoritarismo con el que hemos sido educados, para respetar los derechos de quienes están indefensos y «acabar con esto que crece día a día; que se vive en lo privado, en la invisibilidad y, lo peor de todo, que lo vemos como algo normal».
La diputada integrante de la Comisión de Servicios Educativos advirtió que las repercusiones del maltrato infantil terminan manifestándose en el aula escolar.
Más adelante, la legiladora priísta María de Jesús Aguirre Maldonado refirió que el el tama de la violencia se da en todas las clases sociales en todo el país; de ahí la importancia de que sea analizado por los expertos y al mismo tiempo se difunda para que la ciudadanía actúe cuando se presente algún caso.
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