Las mujeres de la Asociación Velaluz, que realizan una huelga de hambre en la Puerta del Sol desde hace 25 días, en protesta por la violencia contra las mujeres, informan que la respuesta de la sociedad civil ante esta acción ha sido “espectacular”, poro “inexistente” por parte de las nuevas fuerzas políticas.
En un comunicado, emitido ayer para dar a conocer su valoración sobre la actuación de la sociedad civil y de los partidos políticos ante la huelga de hambre, afirman que la “comunicación, apoyo, empatía, denuncia, conocimiento, comprensión y la certeza generalizada de que estamos ante una auténtica epidemia de asesinatos machistas de mujeres, revela la esperanza de transformación de esta sociedad que se palpa en las calles día a día cada vez con mayor intensidad”.
En contraste, “la actuación, o, más bien, inexistencia de actuación y de posicionamiento de las fuerzas políticas de nuevo cuño es sorprendente, decepcionante, entristecedora, espantosa y frustrante”.
Estos partidos nuevos, “que se consideraron adalides del cambio, permanecen ausentes tanto en negociaciones, posicionamiento oficial o, incluso publicidad y propaganda, de esta protesta de mujeres”.
Y esto, dicen, da la “sensación muy desagradable de intención de ninguneo y desprecio al tema fundamental que reside en la base de la transformación de esta sociedad en la que ya no se puede ni vivir: el Feminismo, la lucha de las mujeres, el fin del patriarcado”.
Una huelga de hambre, afirman, “no es algo baladí… mujeres con fuertes convicciones políticas y capacidad de lucha ponemos en riesgo nuestros cuerpos y nuestra salud porque ya no podemos más a causa de que las mujeres ya no podemos vivir en un mundo en el que la competición, el odio, la violencia y la agresión son las dinámicas de funcionamiento de las sociedades. En estas sociedades ya no pueden vivir ni mujeres ni hombres”.
VIEJOS Y NUEVOS POLÍTICOS
Cuestionan las mujeres de Velaluz a las y los luchadores de antaño, que ahora tienen cargos institucionales y que “parecen haber borrado de su mente que llevaron a cabo acciones similares en su lucha política, lo que es doblemente cruel, pues por intereses estratégicos desprecian y no se posicionan, ni atienden, ni negocian, ni respondan.
Critican de igual manera a los partidos surgidos hace una década, que se llamaron “nuevos” y asumieron un espacio “de cambio”, pero que tampoco han hecho el mínimo cambio a la protesta contra esta “sociedad de muerte que utiliza a las mujeres como objetos y que las asesina cuando ya no las necesita”.
E ironizan: “Estas nuevas aves en el firmamento, son más bien gallos que consideran, que las gallinas, bien están poniendo huevos y haciendo lo que tienen que hacer las gallinas, sin salirse del corral, claro”.
17/RED/GG