Los médicos que tratan a personas con el virus de la inmunodeficiencia humana (vih) se centran en su condición física, mientras que su salud mental se ve desatendida, aseguró el doctor Ewald Horwath, de la Universidad Columbia de Nueva York.
El médico, autor principal de una investigación presentada el pasado día 25 durante el encuentro anual de la Sociedad Americana de Enfermedades Infecciosas, fue entrevistado por, información distribuida por varios medios en Internet.
El trabajo, conducido por la Asociación Internacional de Médicos de Sida (IAPAC, por sus siglas en inglés), se publicó en forma de suplemento de la revista de IAPAC y contó con las respuestas proporcionadas por 136 médicos «con gran experiencia en el tratamiento del vih» y por 235 personas portadoras del virus.
Los síntomas psiquiátricos registrados con mayor frecuencia fueron depresión (72 por ciento de los pacientes), ansiedad (65 por ciento), insomnio (48 por ciento), letargo (43 por ciento), irritabilidad (41 por ciento), dificultades de concentración (40 por ciento) y cambios de humor (40 por ciento).
Sin embargo, y a pesar de que aproximadamente cuatro de cada cinco pacientes con vih sufre de síntomas psiquiátricos, sólo un tercio de los pacientes aseguró haber sido cuestionado alguna vez por su médico acerca de la presencia de tales síntomas.
La inmensa mayoría de los médicos considera los problemas mentales como relacionados con sus tratamientos antirretrovirales. De hecho, 84 por ciento de ellos piensa que el tratamiento antirretroviral de gran actividad ocasiona la depresión, la ansiedad y otros problemas de salud mental.
El efavirenz es un fármaco asociado con síntomas neuropsiquiátricos severos, si bien el doctor Horwath subrayó que «los asociados con efavirenz tienden a ser transitorios y a resolverse tras el primer mes de tratamiento».
De acuerdo con la investigación de IAPAC, 80 por ciento de los médicos utiliza antidepresivos con sus pacientes portadores de vih sintomáticos y 56 por ciento se mostró a favor de cambiar el tratamiento de sus pacientes si supieran que causa trastornos psiquiátricos.
En palabras del propio Horwath, «los síntomas neuropsiquiátricos son bastante comunes y es necesario que los médicos (que tratan personas vih positivas) lo sepan y los discutan con sus pacientes».
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