La Morada, un espacio de atención sicológica, médica y jurídica a la mujer que sufre violencia doméstica, abrió sus puertas formalmente hoy en San Cristóbal de las Casas, aunque desde hace 13 años atiende cada mes 100 casos de mujeres violentadas.
Ubicado en el barrio María Auxiliadora, La Morada es una casa que brinda su mano a aquellas mujeres que deciden denunciar la violencia de su cónyuge, novio o amante y a la vez buscan un apoyo integral para iniciar una nueva etapa de su vida.
Es también un esfuerzo del Colectivo de Mujeres (COLEM) quien vive una etapa de transición luego de catorce años de trabajo, y ahora se convierte en el Colectivo feminista Mercedes Olivera y Bustamante AC.
El nombre es en reconocimiento a la trayectoria de Olivera y Bustamante en la lucha feminista, «ahora que todavía está y porque valoramos mucho su enseñanza y queremos seguir su ejemplo», explica la integrante del Colectivo Brenda Velásquez.
El Colem hasta el momento ha atendido cien casos mensuales de mujeres golpeadas o agredidas físicamente por su pareja. «La demanda es mucha, pero el equipo es pequeño, por eso atendemos sólo los casos de violencia doméstica y no violencia intrafamiliar» señala Velásquez.
El mensaje «Contra la violencia hacia las mujeres» arriba del símbolo femenino acompañados de un fondo lila pintados en la fachada de La Morada, parece ser la filosofía de la agrupación que pretende sea la de toda mujer.
La Morada proporciona apoyo integral a las mujeres que padecen agresiones físicas: dan atención médica, asesoría jurídica y se les ayuda sicológicamente. La idea es ver la situación de una manera integral y no aislada, apunta la integrante del Colectivo.
VVS/MEL
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