La policía es una de las principales fuentes de conflicto para la juventud capitalina, quienes señalan agravios distintos como inequidad de género y violencia, así como acoso por el sólo hecho de ser jóvenes, revela un estudio elaborado por la organización de la sociedad civil Iniciativas para la Identidad y la Inclusión (Inicia).
El estudio de percepción sobre el cumplimiento de los derechos humanos, aplicado a jóvenes de entre 15 y 25 años de las 16 delegaciones del Distrito Federal, añade que las y los jóvenes destacan el abuso recurrente por parte de autoridades escolares y laborales.
Héctor Morales Gil de la Torre, coordinador de la iniciativa, explicó que la encuesta incluye a jóvenes de diferentes estratos: se entrevistó a chavos escolarizados, jugadores de futbol llanero, limpiaparabrisas, trabajadores migrantes y vagoneros del Metro, entre otros.
Frente al tema de los derechos humanos destacaron de forma genérica que «no vale la pena hacer nada» para exigir el cumplimiento de sus derechos humanos, ya que «ninguna respuesta es efectiva».
Manifestaron que la responsabilidad para solucionar su situación corresponde a cada joven en lo individual: en que «se porte bien», que «se capacite» o que «se busque otro trabajo». Luego, opinaron que la defensa de sus derechos es responsabilidad absoluta del gobierno, sin considerar la participación de las y los ciudadanos.
Finalmente, consideraron que en todo caso son maestros o empleadores laborales quienes deben cambiar la actitud que tienen hacia ellos (las y los jóvenes).
«En el diálogo con las y los jóvenes, nos percatamos que cuando se habla de derechos, de inmediato surgen historias marcadas por el agravio, y no por una conceptualización clara sobre lo que significa una violación a los derechos humanos», señala Inicia.
La organización de la sociedad civil Inicia fue fundada en 2001, con la misión de elaborar y ejecutar proyectos y programas para el desarrollo, que vinculen a actores sociales e institucionales.
Desde el principio centramos nuestra atención en el tema de la juventud, recordó Héctor Morales Gil de la Torre.
«Desarrollando estrategias, nos dimos cuenta que era necesario especializar el trabajo en dos grandes vertientes: empleo juvenil -donde los chavos simbolizan la idea de bienestar-, y los derechos, donde para ellos es recurrente cierto nivel de maltrato por el sólo hecho de ser jóvenes», apuntó.
Inicia, desarrolla actividades en Puebla, Veracruz, Tabasco, Querétaro, Oaxaca, Chiapas, y el estado de México, además del Distrito Federal.
El estudio forma parte del proyecto «Producción de un modelo pedagógico y materiales didácticos que contribuyan al debate sobre los derechos de las y los jóvenes», el cual plantea la continuación del desarrollo de métodos para la medición de la percepción sobre el cumplimiento de los derechos humanos de la juventud capitalina.
Inicia desarrolló este trabajo con financiamiento de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF) y el Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol), a través del Programa de Coinversión Social 2006.
06/LR/CV