Al recibir su constancia de mayoría, la perredista Amalia García se convirtió ayer en gobernadora electa de Zacatecas, y en sus primeras declaraciones dejó claro que su administración será de compromiso social, cualidad que dijo, ha caracterizado a los gobiernos de izquierda.
Durante el evento realizado en un céntrico hotel de aquella entidad, hizo un llamado a todos los actores políticos, económicos y sociales del estado para conformar «un gran pacto por la entidad». Amalia será la tercera mujer gobernadora en la historia de México electa mediante el voto libre y secreto y la primera surgida de la izquierda y también en su estado.
Ante medio centenar de militantes de su partido, la perredista celebró su triunfo como el mejor ejemplo de la lucha de las mujeres por el poder, al destacar que en su trayectoria no ha existido el «dedazo» y sí mucho esfuerzo y la construcción de un proyecto político propio.
La ex dirigente nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), sostuvo que pese a la difícil situación nacional, su programa de gobierno estatal se sustentará en la búsqueda de acuerdos con el Revolucionario Institucional y Acción Nacional.
«Es real, hay un ambiente nacional muy tenso, muy difícil. Sé que tenemos diferencias de visión y diferencias políticas entre las distintas fuerzas. Pero mi decisión es trabajar por la construcción de acuerdos en mi estado, porque lo que estamos viviendo tiene que ver con esa falta de acuerdos», destacó.
«Sin embargo, en mi propia responsabilidad, haré todo mi esfuerzo para construir una visión común en los temas de la gente y de mi estado. Estoy convencida de que tanto en el PAN como en el PRI, hay hombres y mujeres con los que podemos construir acuerdos», planteó la también ex senadora.
Con Amalia García suman ya cinco las gobernadoras que ha tenido el país: Griselda Álvarez (Colima), Beatriz Paredes (Tlaxcala), Dulce María Sauri (Yucatán) y Rosario Robles (Distrito Federal), éstas dos últimas interinas.
2004/BJ/GV/SM
