Aguantando a la intemperie fuertes temperaturas, vientos y aguaceros, 75 profesoras de educación preescolar realizan un plantón permanente frente a la residencia oficial desde hace siete días, en demanda de plazas y nivelación de salarios bajo la amenaza de ser desalojadas por la fuerza.
Para la Secretaría de Educación de Tabasco son «promotoras técnicos y rurales de educación preescolar», pero en la realidad laboran como educadoras frente a grupo en los jardines de niños rurales de los 17 municipios, realizan trabajo de dirección, administración y de intendencia.
Bajo esa categoría que les dio la Secretaria de Educación estatal laboran desde hace 15 o 20 años alrededor de 800 trabajadores – en su mayoría mujeres- y a pesar de ello no cuentan con plazas ni ganan lo que las educadoras de base.
La profesora Ana María de la O. Cerino, en representación de sus compañeras, afirma que devengan un salario de dos mil 400 pesos mensuales las que no tienen título de educadoras y de tres mil 200 las que cuentan con la licenciatura.
Hasta hace un año, asegura la profesora, no contaban ni con servicio médico, por lo que no tenían derecho ni a enfermarse o embarazarse aún cuando, para no reconocerlas como trabajadoras al servicio del estado, solo les dieron IMSS.
Aunque han realizado varias movilizaciones para que las autoridades educativas de la entidad les reconozcan sus derechos e incluso han firmado varias minutas con la Secretaría de Educación y el Gobierno estatal, nunca les han cumplido.
En una de las más recientes, hizo notar, el Gobierno de Tabasco se comprometió otorgar plazas de manera automática a las que obtuvieran el título de educadoras, lo cual aceptaron.
Sin embargo, de manera dolosa, afirma, el Gobierno cerró la licenciatura de Educación Preescolar en la Universidad Nacional Pedagógica, «para impedir que nos tituláramos».
Aún así muchas hicieron el esfuerzo de estudiar en los estados vecinos, pero de todas maneras el gobierno incumplió su compromiso, «ni nos niveló el salario con las educadoras de base», aseguró.
Después de que iniciaron el plantón frente a la Quinta Grijalva, el titular de la Secretaría de Educación prometió darles una respuesta mañana martes a las 13:00 horas locales: 75 plazas y nivelación de salarios y prestaciones.
Las educadoras rurales a pesar de que esta madrugada pasaron una tromba apenas cubiertas con paraguas y una lona, advirtieron que si la respuesta no es positiva, aparte de que continuarán el plantón, mañana marcharán desnudas hacia el Palacio de Gobierno.
El panorama para las educadoras no es prometedor, el domingo por la noche la directora de Educación Inicial y Preescolar de la Secretaría de Educación, Dorgia Edilia Quevedo Díaz, personalmente les entregó un oficio en el que las llama a iniciar los trabajos del próximo ciclo escolar en sus respectivos centros de trabajo.
Pero además, según las manifestantes, la funcionaria les advirtió que podrían ser desalojadas del parque en donde realizan su plantón, con el uso de la fuerza pública.
2003/CV/MEL
