La Cámara de Diputados aprobó hoy dos iniciativas de ley presentadas por diputadas panistas que modifican la licencia materna de las trabajadoras: una otorga seis semanas a las madres que adoptan; y la otra permite posponer la licencia después del parto hasta un mes.
María del Carmen Mendoza Flores, diputada del Partido Acción Nacional (PAN), por Zapopan, Jalisco, propuso trasladar hasta cuatro de las seis semanas que la ley otorga de licencia a las trabajadoras -antes del nacimiento–, a la fecha posterior al parto.
Así, ella podría trabajar «hasta dos semanas antes del parto sin perjuicio de ella ni de su hijo, y con el respaldo médico institucional, explicó la secretaria de la Comisión de Trabajo y Previsión Social; con el objeto de «ampliar el periodo después del nacimiento, situación que ya se hace en diversas empresas.»
Argumentó que a la fecha, las mujeres tienen derecho a una licencia de seis semanas antes del parto, pero que hoy la medicina permite valorar hasta cuándo puede trabajar una embarazada sin riesgos. E hizo notar que la propuesta actual se basa en una iniciativa hecha por la diputada María Elena Alvarez de Vicencio.
Por su parte, la diputada panista Patricia Flores Fuentes, integrante de la Comisión de Equidad y Género, propuso una reforma que otorgaría un descanso de seis semanas antes de la adopción, y tres después, a las trabajadoras que adopten a menores de seis meses de edad.
Al ser aprobada por el pleno, ambas iniciativas que reforman el artículo 123 de la Constitución, y el artículo 170 de la Ley Federal del Trabajo, fueron turnadas para su análisis a las Comisiones Unidas de Puntos Constitucionales, y del Trabajo y Previsión Social.
APOYAN DIPUTADAS LOS DERECHOS REPRODUCTIVOS
Por otra parte, durante la sesión de hoy, la secretaria de la Comisión de Equidad y Género, Malú Micher refrendó su apoyo a los derechos sexuales y reproductivos de la población mexicana al informar sobre los resultados de la reunión del Comité de Población y Desarrollo de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), que se clausuró el 11 de marzo en Santiago de Chile.
En ésta reunión, en la que participaron tanto funcionarios como representantes de la sociedad civil, las naciones latinoamericanas y del Caribe acordaron reafirmar sus compromisos adquiridos en El Cairo, que incluyen el respeto a los derechos sexuales y reproductivos, por ser parte de los derechos humanos y la lucha contra la pobreza.
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