En Afganistán fueron asesinadas tres mujeres que pertenecieron o que laboraban en la Associació per als Drets Humans a l’Afganistan (ASDHA), en tanto que otras fueron amenazadas.
Así lo denunciaron las integrantes de esta organización de mujeres activistas por los derechos humanos que pidieron el apoyo de organizaciones para presionar al gobierno de Hamid Karzai, que vele por su seguridad integridad física y sus vidas.
En un comunicado urgente enviado por ASDHA a su similar en Barcelona, España, y que está firmado por 27 colectivos y entidades de mujeres afganas pidieron apoyo y movilización para presionar al gobierno de su país.
La semana pasada, tres mujeres aparecieron muertas en una carretera en la provincia de Baghlan, al norte del país. Las cuales fueron violadas antes de ser asesinadas, junto a los cuerpos había una carta en la que se amenazaba al resto de las mujeres que trabajan en la organización no gubernamental de que sufrirán el mismo final si no dejan el trabajo.
El grupo denominado Junbish-e-Mestaq-e-Jawanan se hizo responsable de estos actos de violencia en contra de las activistas, señala el portal Mujeres en Red.
Estos hechos han atemorizado a las mujeres afganas que trabajan por la defensa de los derechos humanos y han empezado a movilizarse, hace unos días alrededor de 400 activistas se manifestaron en Kabul para reclamar más seguridad y apoyo del gobierno del país para su trabajo.
Las activistas afganas tienen y han tenido un papel clave en Afganistán en la defensa de los derechos de las mujeres, han participado activamente en la redacción de la nueva Constitución afgana para conseguir la igualdad de derechos de hombres y mujeres.
Han promovido la participación de las mujeres en las pasadas elecciones presidenciales y ahora trabajan en la difusión de la Convención sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (ratificada por Afganistán en el año 2003), y la movilización de las mujeres de cara a las próximas elecciones parlamentarias.
En esa ocasión, las activistas afganas demandaron protección básica de la dignidad humana de parte del Estado Afgano, como responsable de proteger los derechos, propiedades y dignidad de sus ciudadanos.
Pidieron se castigue a quienes cometieron los crímenes contras las activistas en la provincia de Baghalan, así como por el brutal asesinato de Amina, de 22 años, así como de otra mujer en la ciudad de Pol e Khumri. Actos que, además de preocupar, amenazan la dignidad, el honor y la vida de las mujeres
Por ello, demandaron al presidente electo de Afganistán que centre de manera urgente y personal su atención hacia los asesinatos contra las mujeres.
Pidieron al sistema de justicia reforzar la seguridad en áreas rurales, castigar a los autores de los crímenes para asegurar que las consecuencias de acciones como estas queden claras para todo el mundo.
Así también, exigieron al gobierno de ese país africano, evitar los actos de propaganda en contra de las organizaciones no gubernamentales, para prevenir los asaltos y ataques a los trabajadores.
En tanto que las autoridades religiosas les piden frustrar las acciones y movimientos que ensucien el nombre del Islam y los musulmanes, luego del brutal asesinato de Amina.
Las integrantes de ASDHA exponen que como consorcio de mujeres afganas concienciadas, seguirán denunciando cualquier acción y actividad que perpetúe y promueva la violencia contra las mujeres.
2005/GT/SJ
