Asesinato de alcaldesa debe unir a mujeres en busca de justicia

El asesinato de Gisela Raquel Mota Ocampo, presidenta municipal de Temixco, Morelos, es un “foco rojo” para que las mujeres levanten la voz y exijan al Estado acciones en contra de la violencia política de género, advirtieron activistas, funcionarias, diputadas y regidoras en un homenaje póstumo para la alcaldesa.
 
Mujeres activistas y políticas se reunieron hoy en la sede del Congreso de Morelos para rendir un homenaje a Gisela Raquel Mota Ocampo, presidenta municipal de Temixco, asesinada el pasado 2 de enero.
 
Presente en el evento, la senadora por Movimiento Ciudadano, Martha Angélica Tagle Martínez, declaró que es obligación del Estado garantizar la seguridad, por lo que demandó a las autoridades locales y federales que atiendan la violencia política, especialmente la que se da contra las mujeres.
 
Subrayó que “Gisela fue una convencida de la participación política de las mujeres”, además de que, como dice una consigna feminista, “cuando golpean a una nos golpean a todas”.
 
La senadora precisó que el asesinato de la edil es el motor para que las mujeres políticas comprendan que es tiempo de unidad. “Honremos la vida de Gisela levantando la voz unidas, y no cejemos ante nuestro derecho a estar en cargos de decisión”, observó Tagle.
 
Ana Isabel Trueba, consejera presidenta del Instituto Morelense de Procesos Electorales y Participación Ciudadana (Impepac), advirtió que las mujeres que ocupan un cargo en la función pública no se dejarán amedrentar por este hecho, y enfatizó la importancia de realizar acciones a favor de la juventud de la entidad, en tanto que Gisela “era una joven”, pues tenía 33 años de edad.
 
Por su parte, la diputada local Norma Alicia Popoca Sotelo señaló que “este artero asesinato prende un foco rojo para las mujeres que estamos en la política y debemos unirnos”.
 
En ello coincidió la regidora de Cuernavaca, Karla Jaramillo, quien señaló que “esas balas no sólo le arrebataron la vida (a Gisela Mota) sino el sueño de ser la primera mujer alcaldesa de Temixco”.
 
Por su parte, Paola Cruz, síndica del municipio de Cuautla, dijo que “las síndicas nos sentimos golpeadas, dolidas y vulnerables”. Mencionó que la Alerta de Violencia de Género (AVG) en ocho municipios morelenses, siendo Temixco uno de ellos, obliga a que haya acciones contundentes para frenar este flagelo, por lo que pidió protección para presidentas municipales, síndicas, regidoras y tesoreras.
 
Claudia Castello Rebollar, secretaria nacional de Igualdad del Partido de la Revolución Democrática (PRD), señaló que este es un “momento doloroso para mujeres perredistas y mujeres que hacemos política (…); ninguna mujer mexicana debe morir víctima de la violencia y la violencia generalizada; la violencia contra las mujeres y la violencia contra las mujeres políticas deben parar ya.
 
“La violencia es la negación de la política y la violencia contra las mujeres es la negación de la democracia; por ello debemos sumarnos en la exigencia de justicia; es hora de ponernos de pie, las mexicanas no nos vamos a callar, no nos vamos a retirar; las mujeres que hacemos política queremos paz, desarrollo y justicia”, advirtió.
 
En su intervención, la magistrada del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, María del Carmen Alanís, condenó que Gisela “ni siquiera encontró seguridad en su propio hogar, lo cual quiere decir que la inseguridad se metió a nuestros hogares; estamos en una situación de vulnerabilidad”.
 
Resaltó que la violencia contra las mujeres es violencia contra la democracia, “por lo cual no podemos quedarnos en el reclamo de justicia, ya que ello es obligación del Estado; tampoco podemos concluir con un pésame; este abominable crimen trasciende esos parámetros. Gisela siempre fue una mujer valiente y en honor a ella tenemos que ser valientes… Ya basta. No podemos permitir que el ejercicio de nuestros derechos políticos implique un riesgo, incluso de muerte”.
 
LUCHADORA POR LA PARIDAD
 
Durante el homenaje a la alcaldesa, el magistrado local Hertino Avilés Albavera realizó una semblanza de Gisela Mota a quien conoció personalmente desde que fue su alumna en la Facultad de Derecho y destacó: “La última vez que la vi fue luchando por la paridad horizontal y vertical en las candidaturas”.
 
La madre de Gisela, Juanita Ocampo, con la voz quebrada en momentos pero con gran firmeza, dijo que su hija siempre creyó en la democracia y la importancia de luchar para que todas las personas contaran con mejores posibilidades de vida.
 
La mujer también habló de la trayectoria de su hija y expresó que desde niña siempre estuvo de parte de su pueblo y de las causas sociales. Mencionó las ganas con que su hija esperaba tomar posesión del cargo, para empezar desde el primer día “a cambiar la situación de Temixco”.
 
“Fue trabajadora incansable, luchadora por lograr la igualdad sustantiva entre hombres y mujeres, tanto en la parte conceptual como en la práctica; su gabinete lo conformó mitad mujeres y mitad hombres; estuvo participando activamente por la lucha por la paridad de género, por el empoderamiento de las mujeres, y el programa de prevención de la violencia –en cualquiera de sus formas– en contra de las mujeres. Estaba consciente de la declaración de la AVG en el municipio.
 
“Me lastima mucho que enfrente de mí hayan cortado la vida de mi hija, en mi propia casa; sin embargo, como diría Gandhi: ojo por ojo y todos nos quedaremos ciegos. Exijo justicia porque así como ahora la sacrificaron, mañana podrá ser cualquiera de nosotros, cualquiera de las mujeres que estamos aquí. Les pido compañeras, compañeros, que la sangre de mi hija que quedó regada en la sala de mi casa, no sea en vano. Gisela está aquí entre nosotras y perdurará para siempre”.
 
Para finalizar, la diputada local Hortencia Figueroa destacó: “Debemos honrar su memoria, su vida, su legado, exigiendo justicia. No permitamos que se manche su imagen. Desde su diputación federal la vimos trabajar por su municipio. Quienes estuvimos en su toma de protesta la escuchamos decir que tenía la firme convicción de gobernar Temixco de forma diferente, de la mano de los jóvenes, de las mujeres.
 
“Por ello, esto debe ser un llamado para que llevemos la indignación, la consternación, a la acción. Gisela es una luz para caminar hacia adelante. Su asesinato visibiliza la realidad que vivimos en el estado y que se hayan atrevido a segar la vida de la presidenta municipal es un mensaje de que pueden tocar a cualquiera en donde sea”.
 
Al concluir las intervenciones, se realizaron guardias de honor ante su foto y, posteriormente, mujeres de organizaciones civiles acudieron a la ofrenda de víctimas de Morelos (ubicada en la puerta principal de Palacio de Gobierno del estado), a colocar la fotografía, veladoras y un arreglo floral en memoria de Gisela Mota.
 
16/AMM/RMB