Un grupo de soldados del Ejército Mexicano en estado de ebriedad atacaron a disparos una patrulla de la policía sectorial en este municipio fronterizo con Guatemala.
La comandancia de la policía dijo que los soldados escandalizaban y disparaban con una escuadra 9 milímetros, pero al sentirse descubiertos intentaron escapar a la base militar de Copalar. En su intento los militares atacaron la patrulla durante una intensa persecución a lo largo de la carretera.
Según la comandancia, ambos carros se golpearon con fuerza para «sacarse de la cinta asfáltica», esto hizo que la corporación entera se movilizará al creer que sus compañeros eran atacados por sicarios al servicio del crimen organizado que operan en la frontera con Guatemala.
Lo anterior fue sobre todo porque el sitio donde se realizó el ataque es paso recurrente de miles de inmigrantes sin documentados, drogas, armas y mercancías ilegales procedentes de Centroamérica.
La corporación policiaca señaló que sus elementos lograron la detención del teniente de caballería José Ramiro Langarica Chayres y a sus subordinados César Armando Aguilar Trujillo, José Luis Hernández y Jorge Bautista Benítez, todos en completo estado de ebriedad.
La Secretaría de Seguridad Pública confirmó este lunes que los cuatro militares fueron consignados ante la PGR por los delitos de agresión armada, asociación delictuosa, intento de homicidio, además de conducir en estado de ebriedad, aunque este último es del fuero común.
La unidad de los militares con decenas de botellas de cerveza quedó en las instalaciones de la policía.
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), consultada ayer por la mañana, no hizo comentarios al respecto.
08/MC/CV