En el marco del Tercer Seminario Internacional de Expertos, Drogas y Exclusión Social Grave organizado por la Escuela Nacional de Trabajo Social, Orlando Navarro, director del Hogar de la Esperanza, en Costa Rica, señaló que señaló que en los últimos cinco años se incrementó el número de mujeres contagiadas con VIH/Sida en el país centroamericano.
De 15 a 30 por ciento de las jóvenes se han contagiado con el virus, y explicó que en su país se carece de medidas legales para proteger a las mujeres portadoras del VIH/Sida.
El especialista indicó que la relación entre el virus de inmunodeficiencia humana y las drogas es intrínseco, toda vez que el contexto social, cultural, económico y la falta de educación sexual han sido factores detonantes para la drogadicción, alcoholismo y otras adicciones.
Esto, indudablemente, explicó Navarro, conlleva a la propagación de relaciones sexuales no protegidas y al inminente riesgo de contraer tanto el VIH/Sida, como otras Infecciones de Transmisión Sexual (ITS), representando las mujeres el sector más vulnerable.
Sin embargo, resaltó que otros factores importantes son la cultura machista, la infidelidad y la negativa al uso del condón.
«Desafortunadamente cuando las mujeres se dan cuenta de que tienen el virus es cuando su esposo ya está en el hospital, o a través de enfermedades oportunistas», y agregó «el hombre aún sabiendo que es portador no le dice nada a su esposa».
Orlando Navarro indicó que en su país se vive cotidianamente la discriminación y el estigma hacia las mujeres que viven con el virus, quienes en su mayoría son abandonadas por sus familiares y esposos que las más de las veces les quitan a sus hijos.
En los servicios de salud, incluso, comentó el especialista, los médicos les han negado la realización de pruebas como el papanicolau y otros relacionados con la salud reproductiva o la realización de la cesárea para evitar el contagio del bebé.
Y es que a pesar de la existencia de normas oficiales en el país sobre VIH/Sida, que obligan a los médicos a prestar todos los servicios, se está muy lejos de que sean cumplidas y el género está ausente, alertó Navarro.
En el ámbito laboral, las mujeres son despedidas de sus trabajos por los constantes permisos que deben pedir por enfermedad, y sobre todo cuando éstas son más empleadas en el servicio doméstico y administrativo.
Aunque explicó que en Costa Rica la realización de la prueba de VIH/Sida está prohibida para conseguir un empleo, ésta es violada constantemente por los empresarios quienes a través del examen de gravidez, solicitan a los laboratorios el de detección de VIH/Sida.
Navarro indicó que actualmente se impulsa un proyecto de microcréditos para ayudar a las mujeres portadoras de la enfermedad para apoyarlas a tener una relación más cercana con sus hijos.
Orlando Navarro participará mañana durante el segundo día de actividades del Tercer Seminario Internacional de Expertos, Drogas y Exclusión Social Grave con la ponencia Droga, VIH y género.
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