El medio ambiente y la población de Zihuatanejo, en Guerrero, peligran ante una oleada de construcciones inmobiliarias y la anuencia de las autoridades, denuncian organismos civiles que presentaron este caso para que sea analizado por el Tribunal Latinoamericano del Agua (Tragua) en México, próximo a establecerse.
El modelo de desarrollo de la bahía de Zihuatanejo carece de sustentabilidad, denuncian la Red de Organizaciones no gubernamentales Ambientalistas de Zihuatanejo, el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, las Sociedades Cooperativas de Pescadores y los comerciantes de Zihuatanejo.
La población de Zihuatanejo, mujeres, hombres y menores, esperan los frutos de una promesa de mayor desarrollo turístico mientras enfrentan las consecuencias de un deficiente tratamiento de aguas en cinco plantas -de acuerdo con las propias autoridades ambientales- o de aguas residuales vertidas directamente al mar.
Asimismo, viven la evidente disminución del agua en la bahía y observan cómo las aguas presentan una coloración turbia, un olor pestilente, y la pérdida de profundidad por la sedimentación en el suelo marino.
Por otro lado, la inmobiliaria Punta del Mar S.A. de C.V., vinculada al actual director del Fondo Nacional de Fomento al Turismo, tal y como lo han documentado las organizaciones denunciantes, construye Puerto Mío, un desarrollo inmobiliario con hoteles, villas, albercas y hasta una marina -que incluirá un muelle portuario- a expensas del medio ambiente; al momento, la obra está detenida por falta de un adecuado diagnóstico de su impacto ambiental.
Para la construcción del complejo turístico se han dinamitado algunos de los cerros que rodean la Bahía de Zihuatanejo, y hay otros preparativos para utilizar explosivos dentro del mar a fin de facilitar la construcción del muelle de cruceros a costa de una importante zona de arrecife coralino.
Ante estas irregularidades y los oídos sordos de las autoridades mexicanas en distintos niveles, las organizaciones denunciantes presentaron esta situación para su análisis al grupo científico y legal que decidirá qué casos atenderá el Tragua. En el documento solicitan una condena a Punta del Mar S.A de C.V por graves daños a la biodiversidad y exigen se revoquen las autorizaciones a esta inmobiliaria para la construcción del muelle de cruceros.
Asimismo, culpan al gobierno en todas sus esferas por haber consentido y autorizado desde 1985 el quehacer de esta infombiliaria, al tiempo que exigen a la ciudadanía y a los propietarios que detengan la descarga indiscriminada de contaminantes e iniciar el saneamiento de la zona.
Las organizaciones denunciantes anunciaron un foro que se llevará al cabo el próximo fin de semana en Zihuatanejo para establecer un diálogo con toda la población local en torno a los daños al agua y al ambiente en esas playas.
El Tragua es un tribunal ético en que nueve personalidades del continente juzgarán una decena de casos paradigmáticos que atentan contra el agua como un bien común; se llevará al cabo el próximo mes de marzo en el marco del Foro Mundial del Agua.
05/MR/YT