A unos días de que las fronteras de México se abran para recibir el maíz, frijol, leche en polvo y azúcar importados, como está previsto por el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), organizaciones campesinas, de derechos humanos, sociales y ambientalistas participantes en la Campaña Sin maíz no hay país, sin fríjol tampoco. Pon a México en tu boca realizan un ayuno en protesta por este hecho.
En comunicado de prensa, informaron que el Ayuno por la Independencia Alimentaria, auspiciado por las 300 organizaciones integrantes de la Campaña Nacional en Defensa de la Soberanía Alimentaria y la Reactivación del Campo Mexicano, dio inicio el 10 de diciembre en el monumento al Ángel de la Independencia del Distrito Federal y culminará en enero del año próximo.
El ayuno es la primera de cinco jornadas para manifestar la necesidad de retirar del acuerdo comercial al maíz y el frijol, y por el establecimiento de un sistema permanente de importación para el maíz blanco y la leguminosa.
Participan en la actividad más de 30 organizaciones campesinas, sociales, políticas y sindicales, acompañadas por intelectuales y artistas, quienes desde el primer día recolectaron firmas entre las y los presentes para retirar el apartado agropecuario, mismas que serán entregadas al Congreso de la Unión al término de las jornadas.
Las OSC difundieron asimismo un documento sobre las afectaciones que sufrirá el campo nacional a raíz del TLCAN, que amenaza la disponibilidad, precio y calidad de nuestros alimentos y ponen en jaque la producción agrícola nacional, así como la subsistencia de los productores mexicanos.
Mientras se multiplican las voces que alertan sobre los graves impactos que se esperan, el gobierno mexicano ignora la realidad rural, dice el texto. «Sagarpa publica que en México existe todo para tener un campo ganador y el subsecretario de Planeación Energética de la Secretaría de Energía asegura que México puede convertirse en un exportador neto de biocombustibles en un plazo de cinco a ocho años porque existe voluntad».
En lugar de apoyar a los campesinos conforme es su obligación, Sagarpa ignora los abusos de empresas monopólicas como Maseca y Cargill, que pretenden forzar a los productores nacionales a vender su cosecha a precios bajos, o como Monsanto que esta semana anunció que comenzará a investigar los maíces criollos mexicanos para » ver su potencial productivo y comercial», explica.
México, continúa el texto, es el principal productor mundial de maíz blanco, con 22 millones de toneladas al año, las cuales se emplean para la preparación de tortillas, uno de los alimentos básicos de la dieta de las y los mexicanos. Mientras que Estados Unidos es el mayor productor de maíz amarillo, el cual utiliza fundamentalmente en la elaboración de biocombustibles.
Invitan las OSC a apoyar este ayuno, visitar solidariamente el campamento de los ayunantes, realizar actividades en sus estados o localidades y reproducir el llamado de alerta y demandas campesinas en favor de la soberanía alimentaria y la reactivación del campo mexicano.
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