El dirigente estatal del PRI, Edel Álvarez Peña minimizó la confabulación del gobernador de Puebla y el empresario Kamel Nacif contra la periodista Lydia Cacho y opinó que puede ser «chismitos» en épocas electorales.
Dijo que antes de juzgar al gobernador poblano Mario Marín por el presunto encarcelamiento injustificado de la feminista y periodista, el caso debe investigarse a profundidad por la autoridad competente.
En el marco de la celebración del 50 aniversario del Día de la Mujer Mexicana, el político priísta añadió que «esta maniobra sucia» proviene de adversarios o enemigos del Revolucionario Institucional (PRI) para desprestigiar la campaña presidencial de Roberto Madrazo.
Luego de que el gobernador de Veracruz, Fidel Herrera Beltrán reiterara todo el apoyo para erradicar todas las conductas injustas, indebidas e intolerables hacia las mujeres, Álvarez Peña insistió en una supuesta campaña de desprestigio.
Paradójicamente, mujeres priístas ahí reunidas expusieron su malestar porque en el PRI no se han respetado las cuotas de género a las que se comprometió el ex dirigente del PRI y ahora candidato a la presidencia de la República Roberto Madrazo Pintado.
En Veracruz, de los 69 precandidatos priístas a la diputación federal sólo 14 son mujeres, y de los 9 precandidatos al Senado sólo una mujer se encuentra registrada para el proceso interno.
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