Inicio Bush recrudece trato a migrantes, a quienes considera «clase criminal»

Bush recrudece trato a migrantes, a quienes considera «clase criminal»

Un editorial del New York Times (NYT), titulado «La Jungla otra vez» y publicado hace unos días, arremete por enésima vez en contra de las injusticias que el Gobierno estadounidense de George Bush comete en contra de trabajadoras y trabajadores indocumentados, al tratarlos como una «clase criminal».

«El gobierno está tratando de inflar la amenaza que representan» las personas indocumentadas «a un nivel que justifica sus esfuerzos de captura y castigo para ellos. Ese es un ejercicio fraudulento y una desgracia nacional», subraya el diario.

Y como ejemplo recuerda el influyente rotativo lo sucedido en el matadero Agriprocessors, de Postville, Iowa, en mayo pasado, donde una redada evidenció el abuso extremo contra las y los trabajadores y las malas condiciones en que se sacrifica a los animales.

Las y los trabajadores, uniones y abogados de migrantes, así como investigadores del gobierno, y hasta una organización protectora de animales, revelaron la insalubridad y las condiciones de extremo peligro en que trabajan las y los migrantes.

Un video realizado por una organización protectora de animales muestra a una mujer con la mano deforme que relata al reportero que ella corta carne por 12 horas durante seis días a la semana, por salarios que expertos consideran bajos para esa industria. Se ve también cómo las y los trabajadores jalan las tráqueas de las vacas aún vivas.

Investigadores federales sumaron evidencias e información sobre la contratación de personas inmigrantes indocumentadas bajo un régimen de «legitima jungla».

Durante la redada, cientos de trabajadoras y trabajadoras fueron arrestados por tener falsos papeles de identidad. El número tan grande de detenciones hizo que las y los migrantes, procedentes en su mayoría de Guatemala, fueran transportados de Postville al National Cattle Congress en Waterllo.

No fueron culpados de violaciones administrativas, como ocurría usualmente, sino con agravantes de identidad, un delito grave. Les ofrecieron un arreglo: admitir su culpabilidad y restarles cargos, renunciando a sus derechos, como ser escuchados ante un juez de migración. Pasarían cinco meses en prisión y después serían deportados. O bien, pasar seis meses o más en prisión sin derecho a fianza, mientras esperaban fecha de juicio, para confrontar un mínimo de dos años de prisión, sentenciados y después ser deportados de todas maneras.

Las 300 personas aceptaron el arreglo de cinco meses, después escucharon, en grupos de 17 personas, a un abogado. Cada uno contó con 30 minutos de consulta con el abogado.

La propuesta de aceptar su culpabilidad es brutal, dice el NYT, pero las y los inmigrantes lo aceptaron el encarcelamiento en penales federales alrededor del país por ser una vía rápida para regresar con sus familias. Por miedo y sin saber cómo sobrevivir, muchas de estas familias, que no saben la ubicación de las personas encarceladas, se refugiaron en Iglesias católicas.

Mientras, los dueños de la planta caminan libremente, dice el rotativo, que considera que esta manera de hacer cumplir la ley es un comportamiento enajenado.

ABUSOS

Julia Preston reportó en The Times que las y los trabajadores de Agiprocessors hablaron de las prácticas de abuso, de daños, de niños de 13 años exhaustos por trabajar con grandes cuchillos matando animales en el piso.

Un joven dijo que empezó a los 16 años trabajando 17 horas diarias por seis días a la semana. «Estaba muy triste. Sentía como si fuera un esclavo». Erick Camayd-Freixas, interprete de Corte, denunció que «la mayoría de los clientes que entrevistamos no sabían lo que era un número de seguro social, ni su propósito. A estos trabajadores, dijo, simplemente les llenaban sus papeles en la planta, no saben leer ni escribir español y mucho menos inglés.

El severo proceso judicial de Postville es una extraña y cruel posición de la administración Bush, dice el diario, quien ha abandonado la misericordia y la proporción, persiguiendo a las personas débiles y pobres, lo que aumenta el miedo y la desesperación de las y los trabajadores sin documentos. Es un ejercicio fraudulento y una desgracias nacional, finaliza el diario.

08/LPB/GG

Este Web utiliza cookies propias y de terceros para ofrecerle una mejor experiencia y servicio. Al navegar o utilizar nuestros servicios el usuario acepta el uso que hacemos de las cookies. Sin embargo, el usuario tiene la opción de impedir la generación de cookies y la eliminación de las mismas mediante la selección de la correspondiente opción en su Navegador. En caso de bloquear el uso de cookies en su navegador es posible que algunos servicios o funcionalidades de la página Web no estén disponibles. Acepto Leer más

-
00:00
00:00
Update Required Flash plugin
-
00:00
00:00
Ir al contenido