Las nuevas formas de violencia contra mujeres periodistas se reflejan en las calumnias, tal y como le ocurrió a Blanca Esther Buenfil Vanegas, directora editorial del portal Elcuartopoder.com.mx, quien denunció que por su labor periodística es hostigada vía correos electrónicos en los que se cuestiona su calidad moral.
Buenfil Vanegas, reportera con 25 años de experiencia en Quintana Roo, dijo a Cimacnoticias que el pasado 8 de junio se difundieron en la web una serie de correos que cuestiona su calidad moral y su vida personal, lo cual –acusó– ocurre a raíz de su postura crítica ante el gobierno del estado, encabezado por Roberto Borge.
La periodista aclaró que no es la primera vez que es hostigada por su labor informativa. En ocasiones anteriores recibió amenazas telefónicas contra la vida de sus hijos, además en 2002 fue agredida físicamente por un sujeto desconocido, hecho que denunció ante la Procuraduría de Justicia estatal sin tener respuesta hasta ahora.
Blanca Esther Buenfil contó que el pasado 8 de junio circuló en la web un correo en el que se desacredita su vida personal y su calidad moral como periodista. Este hecho ocurrió un día después de que publicó un artículo para denunciar los «trabajos sucios» que se realizan en dependencias estatales.
De acuerdo con la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, el derecho a expresar las opiniones propias y a circular la información disponible es condición indispensable para la consolidación, el funcionamiento y la preservación de los regímenes democráticos y del Estado de Derecho.
Buenfil Vanegas no obtuvo respuesta de su primera denuncia hace nueve años, y en esta ocasión decidió denunciar las amenazas y la difamación ante la policía cibernética y ante la Procuraduría de Justicia estatal. Ahora sólo espera que la Fiscalía Especializada en Atención a Delitos contra Periodistas de la PGR atraiga el caso.
La Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia establece que cualquier acción u omisión, basada en su género, que cause a las mexicanas daño o sufrimiento psicológico, físico, patrimonial, económico, sexual o la muerte tanto en el ámbito privado como en el público, constituye un tipo de violencia.
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