En México, desde 2006 el cáncer mamario es la primera causa de muerte en mujeres mayores de 40 años por tumores malignos, por lo que ha desplazado al cáncer cérvico-uterino, señala el «Reporte Rosa 2009-2010: Cáncer de mama a con-Ciencia».
El Reporte Rosa es un informe elaborado por 16 organizaciones civiles con el objetivo de mostrar a la sociedad y a las autoridades la gravedad y falta de avance en la prevención de esta enfermedad, pues destaca que diariamente mueren 12 mujeres a causa de cáncer mamario, esto es, aproximadamente una tercera parte de las pacientes diagnosticadas, lo que ha convertido a la atención de este padecimiento en un reto de salud pública.
El documento es también una solicitud dirigida a las instituciones públicas y privadas para que inviertan más en este rubro, ya que, tal como señala el estudio, a diferencia de Estados Unidos, donde 60 por ciento de los casos se detecta en etapa uno, en México la cifra de detección en esta etapa no llega al 10 por ciento: 50 por ciento se diagnostica en etapa tres o cuatro, cuando la posibilidad de éxito de una intervención es más baja y los costos de atención médica resultan más altos.
El reporte indica que 45 por ciento de los casos y 55 por ciento de las muertes de mujeres por esta enfermedad ocurren en países en desarrollo; además, deja entrever que es un mito el que sólo ataque a mujeres de edad avanzada, ya que la mayoría de las afectadas tienen menos de 54 años.
Por otra parte, cifras del Programa de Acción del Cáncer de Mama 2007-2012 muestran que la cobertura de detección por mamografía en mujeres de 50 a 69 años de edad es apenas de 8.5 por ciento, aunque no existen datos sobre la calidad de la imagen y la interpretación de las mamografías.
Por esta razón es importante la exploración corporal. Menos del 15 por ciento de las derechohabientes del IMSS y de la Secretaría de Salud se exploran los senos mensualmente y sólo una de cada cuatro acude a un examen clínico, indica el mismo programa.
Sólo 22 por ciento de las mujeres de 40 a 69 años de edad reportó, en la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2005-2006, haber ido a una revisión clínica de mamas o haberse realizado una mamografía; en consecuencia el riesgo de morir por cáncer mamario ha aumentado en la gran mayoría de los estados del país, aunque el fenómeno es más marcado en las zonas norte y centro.
Entre las propuestas del reporte destaca establecer un sistema de monitoreo y control de la detección temprana; implementar un sistema de acreditación para garantizar la calidad de la mamografía en México, así como un sistema de certificación médica para la detección y el diagnóstico de cáncer de mama.
También recomienda ampliar la investigación sobre el padecimiento para la obtención de mayores datos, así como garantizar el acceso de las mujeres a servicios de salud de calidad basados en los avances científicos y médicos, y no en la disponibilidad de los recursos económicos, pues la salud de las mujeres es un derecho que el Estado tiene la obligación de tutelar.
El estudio enfatiza la necesidad de crear un registro de incidencia del cáncer de mama para después enlazar las estadísticas con las encuestas nacionales de salud, las bases de datos de consultas del Sector Salud –Secretaría de Salud (SS), Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) e Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado (ISSSTE)– y el registro histopatológico nacional
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