La anticoncepción de emergencia (AE) es el único método que evita hasta en 95 el embarazo no deseado, siempre y cuando se suministre durante las siguientes 24 horas de la relación sexual no protegida.
Así lo aseguró Susana Medina, especialista de la asociación civil The Population Council, al participar en la conferencia Me protejo porque te quiero, organizada por el Centro de Estudios en Ciencias de la Comunicación de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) de la UNAM.
Para Medina, la AE ha sido ampliamente aceptada por las mujeres, debido a que se trata de un método aprobado y recomendado por las autoridades sanitarias internacionales; en particular por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que ha exhortado a los países a incluirla en sus normas de salud.
Se trata de un método apropiado para aquellas mujeres que tuvieron una relación sexual no protegida, con rompimiento del condón o producto de una violación y desean evitar el embarazo; además, impide también los abortos inducidos.
La especialista recordó que, a pesar de que este método se usa desde hace cerca de 30 años, aún es poco conocido. A diferencia de los tradicionales, que previenen el embarazo antes o durante el coito, la AE puede evitarlo hasta unas horas después de haberse dado la relación sexual; lo cual es posible mediante el uso de pastillas anticonceptivas normales en dosis concentradas y por corto tiempo.
Susana Medina señaló que los anticonceptivos han evolucionado de tal forma que hay algunos que sólo contienen una hormona; en el caso de la AE, el régimen de progestina sola es más efectivo y tiene menos efectos secundarios.
La AE consiste en dos dosis: la primera debe tomarse tan pronto como sea posible, dentro de las 72 horas después del coito, y la segunda 12 horas después de la primera dosis. En México sólo hay una marca comercial disponible de progestinas solas.
No obstante, es importante dejar claro que el uso de la AE puede tener efectos secundarios; por ejemplo, los más comunes son las náuseas, que se presentan en cerca de la mitad de las mujeres; el vómito, que aparece en un 20 por ciento de ellas; dolor de cabeza, hipersensibilidad de los senos y retención de líquidos en el menor de los casos. Síntomas todos que desaparecen a las 24 horas.
La menstruación subsiguiente se presenta en más del 80 por ciento de las mujeres en la fecha prevista; aunque sólo en un 15 o 20 por ciento hay sangrado en los días posteriores a la primera toma o antes de la fecha prevista.
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