Ninguno de los ocho soldados del Ejército mexicano debería obtener su libertad, pese a las graves omisiones hechas en el juicio, luego de haber sido acusados de violar a 14 trabajadoras de la zona de tolerancia de Castaños, Coahuila, así como lesionar a clientes y policías municipales, usar indebidamente armas de fuego, uniformes y vehículos de la institución militar.
Abogada y defensora de los derechos de las mujeres, Martha Figueroa Mier sostiene que cada uno de los ocho soldados detenidos en el penal de Monclova, en el estado fronterizo de Coahuila, debe recibir «en justicia» al menos 20 años de prisión, sin contar ?apuntó- el resto de los delitos que cometieron y que «se quedaron subsumidos indebidamente en el delito de violación a las 14 trabajadoras de la zona de tolerancia».
Figueroa Mier, la abogada que llevó el caso de las tres indígenas tzeltales violadas por militares en julio de 1994 en Chiapas, valoró como «extraña» la estrategia del juez Hiradier Huerta Rodríguez en el caso Castaños, al dividir el juicio por cada una de las agredidas, lo que le da un margen más amplio de tiempo para dictar sentencia, «para mi una estrategia más de maña que de justicia».
Aun cuando la abogada del Grupo de Mujeres de San Cristóbal de Las Casas sostiene que lo rescatable es que el caso Castaños se sostenga por el fuero común y no por el militar, sin embargo, hay omisiones graves que lo ponen en riesgo, las cuales fueron cometidas por el propio juez de la causa y el Ministerio Público (MP), «actitudes erráticas que me llevan a pensar que el gobierno de Fecal (Felipe Calderón) tiene metidas las manos».
DETALLES OMITIDOS
A poco de que el juez Huerta Rodríguez de a conocer la sentencia condenatoria o no contra ocho de los 12 soldados que intervinieron la madrugada del 11 de julio de 2006 en el ataque a la zona de tolerancia, la abogada Figueroa Mier analiza los hechos y apunta que de entrada hay un delito grave que castigar: la violación agravada de 14 mujeres.
Si bien es cierto que hay una causa civil por violación, pregunta ¿dónde está la causa militar por uso indebido del uniforme, armas, abandono, deserción? Delitos también graves cometidos por los soldados que abandonaron el cuidado de las boletas electorales en el Instituto Federal Electoral de Monclova, pues asegura que aún cuando estén detenidos eso no impide que les haga una corte militar.
De los hechos ocurridos, tampoco las autoridades municipales y estatales de Coahuila se dieron por ofendidos por los desmanes provocados por los soldados, quienes pusieron en peligro la vida de los habitantes de Castaños y los municipios cercanos.
De igual forma, el gobierno estatal de Coahuila debió «berrear y patalear porque el fuero militar no podía hacer eso en el territorio coahuilense». En ese sentido, la experimentada abogada afirma que el MP de Coahuila debió darse por ofendido «mínimo lo que hubo fue la ruptura del pacto federal».
«Los tipos iban borrachos, uniformados, con armas de alto poder de uso exclusivo del Ejército, incluso los vehículos que llevaban son armas poderosas, entre ellos una hummer amartillada, y el presidente municipal de Castaños (Mauro Zúñiga Llamas) no puso ninguna queja.
Figueroa Mier sostiene que los delitos cometidos aquella madrugada quedaron subsumidos en la violación a las 14 trabajadoras, incluso, los ataques a los clientes y policías municipales que custodiaban el lugar, quienes no sólo fueron agredidos verbal y físicamente sino también habrían sido agredidos sexualmente por los soldados.
De estos probables hechos, explica por separado la abogada Martha Castillón, integrante del Centro de Orientación y Protección a Víctimas de Violencia Intrafamiliar (Coprovvi), no hay denuncia, pero hubo «comentarios y los policías y clientes no quisieron denunciar por lo que para ellos como hombres representa un hecho de esa naturaleza».
En tanto, la abogada Figueroa Mier indica: «nadie se cree el cuento de que fue así porque es un delito superior a los otros o que ellos (el MP y el Juez) consideran el bien jurídico de la libertad sexual de las sexo trabajadoras a ese nivel. Lo cierto es que se cometieron delitos graves que no aparecen en el juicio contra los soldados ni sabemos cuándo van a ser procesados por ello».
NEGLIGENCIA O COMPLICIDAD
Ante esta situación, que hubo graves omisiones de parte del MP que corresponda a Castaños, a quien podría incluso generar una averiguación previa por negligencia, complicidad o coparticipación en las acciones penales que no generó o presentó ante el juez de la causa y por parte del juez quien debió exigir lo que hacía falta en el caso.
Como sea, ninguno de los soldados detenidos podría obtener su libertad ante un hecho de violación agravada, puntualiza la abogada del Grupo de Mujeres de San Cristóbal de Las Casas.
En la actualidad ocho soldados: Casimiro Ortega Hernández, Rosendo García Jiménez, Omar Alejandro Rangel Fuentes, Fernando Adrián Madrid Guardiola, Ángel Antonio Hernández Niño, Norberto González Estrada, Norberto Carlos Francisco Vargas y Juan José Gaytán Santiago siguen un proceso del fuero civil, luego de que fueron entregados por la Procuraduría Militar desde el 20 de agosto de 2006.
Tres más se encuentran prófugos, se trata de Ricardo Hernández Hernández, Bardomiano Hernández García y José Raúl Ramírez Martínez; un cuarto elemento, Héctor Méndez de la Cruz fue detenido en enero pasado y liberado ocho días después por un incidente de desvanecimiento de datos.
07/SJE/GG
