Más que conmemorar, el Día Internacional de Acción por la Salud de las Mujeres, aquí se lamentó la situación que persiste por el grave rezago en que viven las chiapanecas, uno de los estados con más altos índices de muerte materna y donde el cáncer cérvico uterino sigue cobrando vidas.
Alrededor de 400 mujeres mueren al año en Chiapas, de ellas, 150 fallecen debido a la falta atención en el parto y, unas 250 más por el cáncer cervouterino, sostuvo Laura Miranda Arteaga, integrante del comité por una maternidad voluntaria y sin riesgos.
La médica de Marie Stopes dijo, en conferencia de prensa, que el Día de Acción por la Salud de las Mujeres es para hacer un llamado a las instituciones, la sociedad, todas los sectores para unir esfuerzos.
Que este día, dijo referiéndose a la conmemoración del 28 de mayo, sea para celebrar que las mujeres ya no nos morimos, que tenemos educación y servicios, que hay bienestar real en el componente de la salud de las mujeres.
Recordó que Chiapas, que junto con Oaxaca, Guerrero, Veracruz, Hidalgo, se encuentran con la más alta incidencia de muerte materna.
Miranda Arteaga dijo que a pesar de los esfuerzos realizados a través de distintos programas, en la entidad se ha presentado un incremento sostenido de la razón de muerte materna en los últimos diez años, con una tasa de 5.9 por 10,00 mil nacidos vivos en el año 1990; llegando a 8.9 para el año 2002.
Algunos estudios recientes de la mortalidad materna en Chiapas demuestran que más del 50 por ciento de los decesos ocurrieron en el primer nivel de atención durante el 2002 y 2003, y más del 50 por ciento de las muertes ocurrieron en el área de responsabilidad del Instituto de Salud, siendo las causas de muertes: Hemorragia obstétrica; síndrome hipertensivo del embarazo e infecciones.
A su vez, el secretario de Salud, Ángel René Estrada Arévalo, sostuvo que en lo que va del año, en Chiapas se ha reducido al 60 por ciento el número de muertes maternas. Dijo, que en los primeros cinco meses del 2003 se registraron 42 decesos relacionados con el proceso de parto, en tanto que para este año, se ha reducido a 18 el número de fallecimiento.
Las muertes de las mujeres en Chiapas ocurren durante parto y el posparto, porque se mueren desangrándose porque no tienen el servicio adecuado y no tienen acceso a un servicio de urgencia obstétrica.
El Comité por una Maternidad Voluntaria y Sin Riesgos llamó a las instituciones a enfocar la estrategia de atención a la emergencia obstétrica, que puede darse desde el primer nivel de atención. Y, obligadamente, en el segundo nivel de atención donde participa toda la comunidad, a través de las redes sociales, así como personal del primer nivel y los miedos de las unidades médicas.
Las muertes de mujeres es un evento exclusivo de las zonas indígenas, de mujeres pobres y jóvenes de aproximadamente 25 y 30 años.
Miranda atribuye las muertes maternas debido a que no se ha podido lograr la confianza de la población en las zonas indígenas ni ubicar los recursos donde deben estar y porque los programas no han sido exitosos hasta la fecha, lo que se refleja en los números decesos que siguen en aumento.
La direccionalidad de los recursos, es un factor elemental para la atención real a las mujeres, concluyó la médica de Marie Stopes.
2005/CR/SJ
