Diferentes agrupaciones civiles en Tuxtla Gutiérrez que trabajan con el tema de derechos sexuales y reproductivos lamentaron que este asunto no esté plasmado como prioritario en el Plan Estatal de Desarrollo.
Entrevistados por separado, el director del Colectivo Integral de la Familia (Cifam), Arturo Vásquez Razo; la representante en Chiapas de la Red de los Derechos Sexuales y Reproductivos (Ddser), Nancy Zarate Castillo, así como Carmen Marín Levario, integrante del Grupo Amplio de Mujeres (GAM), condenaron que el gobierno del estado no tenga como punto prioritario garantizar el respeto a los derechos sexuales y reproductivos.
A pesar que la disminución de la mortalidad materna es uno de los principales retos del gobierno de Chiapas en el rubro de salud, según el Plan Estatal de Desarrollo, este tema no podrá resolverse mientras no se respeten los derechos sexuales y reproductivos, consideró el director de Cifam, Arturo Vásquez Razo.
En tanto, la representante en el estado de Ddeser consideró que para disminuir el índice de embarazos no deseados, embarazos en adolescentes y detener el incremento de personas infectadas con VIH es necesario tomar en cuenta el tema de los derechos sexuales y reproductivos en las acciones de gobierno.
Carmen Marín Levario, docente de la Facultad de Humanidad de la Universidad Autónoma de Chiapas (Unach), opinó que este tema debió de ser un asunto transversal en el Plan Estatal de Desarrollo para ser abordado por diferentes dependencias de gobierno como la Secretaría de Salud y de Educación.
CHIAPAS, EL MÁS POBRE
Los derechos sexuales y reproductivos garantizan que tanto hombres como mujeres pueden ejercer su sexualidad de manera libre y responsable y decidir el número y esparcimiento de hijas e hijos que desean. El Estado debe de garantizar que la población esté informada en torno a estos derechos y proporcionar los métodos anticonceptivos a la población que así lo requiera.
Chiapas es uno de los estados más pobres del país, sus municipios se encuentran entre los más marginados, de acuerdo al último informe sobre Índice de Desarrollo Humano presentado en días pasados por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que lo compara con las naciones de Cabo Verde (en la costa africana) y con la República Árabe de Siria e, incluso, ha sido superado por el Salvador.
Además, el estado se ubica entre los tres primeros lugares de muerte materna ?junto con Guerrero y Oaxaca? y, según el más reciente estudio de la organización Fundar, las mujeres de las comunidades indígenas de Chiapas desde siempre han sido excluidas de los sistemas de salud y enfrentado una serie de barreras para acceder a los servicios, situación que se refleja en las elevadas tasas de muerte materna.
Por otra parte, el Consejo Nacional de Población (Conapo) reconoce que los niveles de uso de métodos anticonceptivos en el medio rural siempre han estado por debajo de los usados en el ámbito urbano.
En 2006, refiere Conapo, mientras tres de cada cuatro mujeres unidas urbanas practicaban la anticoncepción (74.6 por ciento), en las áreas rurales la proporción apenas se aproxima a seis de cada diez (58.1 por ciento).
Es de destacar que esta cobertura del 58.1 por ciento, dice Conapo, apenas se aproxima a la cobertura urbana de 1987, que fue de 61.5 por ciento. Dicho de otra forma, las zonas rurales tienen un atraso de 20 años con respecto a las urbanas en cuanto a prevalencia anticonceptiva se refiere.
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