Las Mujeres de la Ruta Pacifica reiteraron la necesidad de una salida política y negociada al conflicto armado en Colombia e insistieron en la urgencia de un Acuerdo Humanitario que conduzca a la liberación de cientos de mujeres y hombres que se encuentran secuestrados en Colombia, como única vía que puede garantizar su regreso con vida y a salvo.
El respeto a la vida y a la libertad son derechos inalienables e imperativos éticos para las personas, las sociedades y el Estado, dijeron las Mujeres de la Ruta Pacífica por medio de un comunicado.
Afirmaron que creen que el sufrimiento de las secuestradas y los secuestrados, quienes han tenido que pasar en estado de cautiverio en diferentes sitios del territorio colombiano, es suficiente argumento para que el Acuerdo Humanitario sea una realidad.
Manifestaron también su permanente preocupación por la persistencia del conflicto armado en el país y la instrumentación de la política de seguridad democrática, estimulando la militarización de la vida civil a través del incremento del pie de fuerza y expandiendo la actividad bélica por medio de operaciones militares.
Éstas han provocado la violación al derecho a la vida de cientos de civiles mujeres y hombres que son mostrados a la opinión pública como delincuentes «muertos en combate», poniendo en riesgo una salida política y negociada del conflicto armado colombiano, la cual consideramos es la única vía que nos puede conducir a un hogar, un país y un planeta libre de miedos, guerras y violencias, señalan.
ROTUNDO NO A LA GUERRA
Afirman las Mujeres de la Ruta Pacífica que «nunca dejaremos de decir: rechazamos rotundamente la Guerra; el secuestro es un crimen de lesa humanidad; rechazamos todos los crímenes cometidos por el Estado, los paramilitares y las guerrillas: las desapariciones forzadas, el desplazamiento forzado, el reclutamiento de hombres y mujeres para la guerra».
Rechazan también el rescate militar de las personas secuestradas, pues los riesgos son altos de continuarse por el camino de las salidas militaristas. Y consideran que todo asesinato de hombre o mujer expresa la falta de imaginación humana para solucionar las diferencias.
EXIGIMOS
Y exigen: que la sociedad civil en general ponga su empeño y buenos oficios para que se concrete el Acuerdo Humanitario ya. Colocar la vida por encima de las decisiones y las acciones que se tomen para liberar a los secuestrados y las secuestradas.
Que haya justicia real para los victimarios que asesinaron, desaparecieron, secuestraron, y se le devuelvan las tierras a las familias campesinas que fueron desarraigadas de sus territorios. Que la verdad salga plenamente, y que haya reparación integral para las victimas.
Exigen el respeto a la vida y todos los derechos humanos de los secuestrados y secuestradas y la sujeción a las normas del Derecho Internacional Humanitario por todos los actores armados involucrados en el conflicto.
Asimismo, solicitan a la comunidad internacional se acerque a las iniciativas de las víctimas y se convierta en un canal mediador para el acuerdo humanitario y la salida política al conflicto armado.
Finalmente, piden «insistir nuevamente en la presencia de un Enviado Especial del Secretario General de las Naciones Unidas para asuntos de paz que recupere la confianza de las Partes y avance hacia salidas políticas que superen la guerra».
08/GG
