Al concluir los trabajos de la Reunión internacional de expertas y expertos sobre cohesión social, políticas conciliatorias y presupuesto público, se destacó la urgencia de que los gobiernos de América Latina y el Caribe incluyan en sus presupuestos la equidad de género si no quieren profundizar la brecha de las desigualdades entre mujeres y hombres.
Durante los tres días que duró el encuentro, las y los expertos, estudiosos del tema, representantes del gobierno, sociedad civil, academia y agencias de cooperación internacional avanzaron en un primer intento de propuesta de agenda política en materia de políticas conciliatorias, donde se dejó clara la necesidad de articular alianzas en los ámbitos regional, nacional y local, así como identificar a las y los actores políticos y sociales para avanzar en la construcción de un diálogo social.
Para ello se deben tomar en cuenta los diferentes roles, capacidades y necesidades tanto de la población femenina como de la masculina, pues es un hecho que los presupuestos no pueden ser neutrales desde el punto de vista de género, opinó Judith Astelarra, profesora titular de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), de España.
La especialista consideró que la región latinoamericana y caribeña «debería de asumir el desafío de construir políticas económicas en las que haya una rendición de cuentas, porque no hay nada peor que tener los problemas debajo de la mesa y, al mismo tiempo, impulsar políticas conciliatorias como una forma de buscar solucionar los abismos que hay entre el trabajo productivo y el reproductivo».
Zarela Villanueva, magistrada de la Corte Suprema de Justicia de Costa Rica, consideró que además de voluntad política se requiere de un cambio de mentalidades para incluir la perspectiva de género en los presupuestos de cada nación y reconocer que es necesario conciliar responsabilidades familiares con laborales.
«De nada sirve tener una norma si no es utilizada, si no hay mecanismos para avanzar hacia la equidad de mujeres y hombres», consideró la funcionaria, quien se pronunció por buscar alianzas con todos los actores políticos y sociales con el fin de involucrarlos más en el tema, sobre todo en un mundo globalizado donde se le da más importancia a los derechos del mercado que a los de las mujeres.
En el foro organizado por el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA, por sus siglas en inglés) en asociación con el Proyecto de Política Fiscal Pro-Equidad de Género en América Latina y el Caribe de la Cooperación Técnica Alemana (GTZ, por sus siglas en alemán), se dejó claro que en la última década el tema de equidad ha estado olvidado en las políticas nacionales, con excepción de los movimientos feministas que lo han tenido como eje central de sus agendas.
HACIA UNA AGENDA NACIONAL
Al respecto, Palema Farías, encargada de Género de la Dirección del Trabajo de Chile, recordó que la asignación de presupuestos públicos debe partir no de una agenda específica para mujeres, sino de una agenda nacional con perspectiva de género.
Para la experta chilena, se debe ir más allá de conciliar las responsabilidades familiares con las laborales, pues «pareciera que lo único que se busca es otorgarle más espacios a las mujeres en sus centros de trabajo para que tengan más tiempo de planchar, cocinar, cuidar a las hijas e hijos.
«A mi juicio ello es un retroceso, cuando lo que se debe de buscar es fortalecer una mayor participación femenina de calidad con sueldos equitativos a los de los varones, mejores políticas sanitarias y el acceso a una educación de calidad en igualdad de oportunidades», anotó.
Las expertas panameñas Aracelly de León e Isabel Atencio, de la GTZ/INFPA, coincidieron en la necesidad de impulsar en la región, y de manera particular en cada país, políticas con equidad de género, porque amén de que se ratifican convenios, acuerdos, tratados, leyes y demás instrumentos en favor de las mujeres, éstos por sí solos no traerán la igualdad de la población femenina si no hay voluntad política.
«Con todos los instrumentos que ha ratificado Panamá, las mujeres deberían estar en el primer mundo en cuanto a sus derechos», opinó De León, quien resaltó sin embargo que aun cuando tengas leyes y programas, «sin presupuestos no haces nada».
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