Reunidas en un estudio de televisión, las consortes de cuatro gobernantes estatales y la del presidente de México, se pronunciaron hoy por que el poder legislativo regule las actividades de las llamadas «primeras damas».
Invitadas al panel Mujeres Junto al Poder, que transmitió esta mañana el Canal Once dentro del programa Diálogos en Confianza, las consortes de los gobernadores de Chiapas, Durango, Guanajuato, Puebla y la de México, señalaron la necesidad de que sean reguladas sus actividades y se pronunciaron por la eliminación del término «primera dama».
Sin curricula, ni agendas definidas, sin sueldo, ni reglamentación, las esposas de los gobernantes estatales afirmaron que dirigen la política asistencial de sus entidades con entrega, una labor que algunas de ellas, no soñaron con realizar.
«Dejé la sartén para tomar el micrófono» explicó la normalista Marta López de Salazar, esposa del gobernador de Chiapas al participar en el panel Mujeres Junto al Poder, del programa Diálogos en Confianza transmitido este lunes por Canal Once.
Madre de dos hijos, se decidió a asumir la vida pública un ocho de marzo, el día de su primer discurso en la capital del estado como esposa del candidato de la coalición opositora.
Marta López aseguró a Fernanda Tapia, conductora del programa, que decidió asumir la dirección del DIF «solamente si podía hacer un cambio radical.» Hoy se llama Instituto de Desarrollo Humano.
En su caso, la esposa del gobernador de Durango, Margarita Gacía de Guerrero, se casó con la idea de atender, cuidar y querer a su marido. Anteriormente, lo acompañaba durante las campañas para regresar al hogar al final de las mismas. Para esta directora del DIF Durango, con cuatro hijos varones y siete nietos, la familia «es su objetivo primoridal».
Admitió que le negaron toda información sobre el funcionamiento del DIF hasta que su esposo no tuviera la constancia de mayoría.
TODAS LAS MUJERES SOMOS DE PRIMERA
Margarita García negó la validez del término «primera dama» porque todas las mujeres son de primera y anotó que nunca lastimaría a una mujer «en este mundo de machos.»
Por su parte, Frances Siekman de Romero (a quien todos llaman Faffie), con 10 hijos, dirige el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) en Guanajuato. Su contribución a esa institución data desde los años 70.
De manera similar, María del Socorro Alfaro, esposa del gobernador de Puebla, asegura que se casó cuando «el ya era político.»
En el programa estuvo también Marta Sahagún, esposa del presidente Vicente Fox. Ella también es una de las pocas consortes que rechazaron asumir la dirección del DIF nacional. Como mujer junto al poder sostuvo a lo largo de las dos horas la importancia de fomentar la tolerancia y mirar a la política y al poder como una forma de servicio.
Durante la transmisión, tanto las invitadas como el público se pronunciaron por eliminar el término de «primera dama» y coincidieron en que las esposas de gobernantes, sin ser funcionarias electas, se les da poco y se les exige mucho.
Mientras, la investigadora de la Universidad Nacional Autónoma de México, Olga Bustos, llamó la atención al panel sobre el papel de «super mujer» que suele asignarse a las compañeras de gobernantes.
Aseveró que por tratarse de una mujer en ese cargo se le asignan tareas diversas que de rechazarlas se tendrían que delegar en varias secretarías o programas distintos y propuso se legisle sobre las funciones de las llamadas primeras damas.
Otras tres académicas, Adriana Ortiz Ortega, Mercedes Barquet y Graciela Hierro, coincidieron durante la transmisión en que la decisión de estar en el poder público o conservar la autonomía se debe tomar con libertad y conciencia por cada esposa.
Finalmente, las panelistas aseguraron que se debe respetar la heterogeneidad en todos los casos y la tolerancia tiene que prevalecer.
MR/MEL
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