Más de 500 mil refugiados, mujeres y niños la gran mayoría, han regresado a Afganistán desde principios de marzo, asegura la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR).
El mayor número de ellos vivía en condiciones extremadamente marginales en campos de refugiados de Pakistán, por lo que su vuelta a casa les permite sentirse con más estabilidad, indica el organismo internacional.
Sin embargo, ACNUR solicitó más fondos para ayudar a Afganistán ya que la comunidad internacional no está cumpliendo los compromisos que asumió en la conferencia de donantes que se celebró en Tokio, el pasado mes de diciembre.
De acuerdo con la experiencia de ACNUR, el retorno al lugar de origen requiere también de recursos materiales y humanos que le permitan a la población reconstruir una vida en su lugar de origen.
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