El Grupo de Estudios sobre la Mujer «Rosario Castellanos» anunció que desarrolla el proyecto Justicia para las Mujeres: procesos de adaptación dentro y fuera de la prisión. Aprendiendo derechos y libertades.
Este proyecto, coordinado por la doctora Concepción Núñez Miranda se realiza con el apoyo de laCoordinación General de Programas y Proyectos Especiales de la Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, informó el organismo en un comunicado de prensa.
Núñez Miranda informó que este proyecto derivó del trabajo de investigación que realizó en la cárcel de Santa María Ixcotel, relacionada con las mujeres indígenas presas por delitos contra la salud, que hoy llama delitos de la pobreza.
La socióloga asegura que la investigación le permitió conocer detalladamente la situación de injusticia que viven mujeres reclusas, cuyos procesos «en la mayoría de los casos están llenos de anomalías».
Explica que casi todas las mujeres detenidas por «delitos de la pobreza» son atendidos por abogados de oficio, quienes sólo cubren el requisito que marca la ley y no hacen una auténtica defensa de ellas, además las mujeres indígenas no cuentan con traductores en el momento de ser interrogadas, por lo que se violan sus derechos humanos, recalcó.
Estos ejemplos nos hacen pensar que el sistema de procuración de justicia en el estado y en el país debe ser cuestionado y exigir que se revise y se transforme, agregó la socióloga feminista.
Subrayó que este proyecto le permite al Grupo de Estudios sobre la Mujer «Rosario Castellanos» profundizar en los estudios de género de este sector de mujeres que se encuentra en una situación social de mayor vulnerabilidad, además de apoyar el seguimiento y acompañamiento en materia de justicia a las mujeres castigadas severamente por los sistemas de administración de justicia.
Los objetivos, explica, son incrementar los conocimientos, habilidades y sensibilidad del personal que atiende los reclusorios mixto de Santa María Ixcotel y para mujeres ubicado en Tlacolula; así como dar seguimiento a seis mujeres indígenas ex reclusas, que obtuvieron su libertad recientemente luego del trabajo de investigación realizado por la propia Núñez Miranda.
También se busca incrementar los conocimientos, habilidades y conciencia de un grupo de seis mujeres indígenas ex reclusas para que sean la conciencia transformadora de su ámbito personal, familiar y comunitario y contribuir a generar una cultura de respeto a las mujeres en reclusión y la prevención del delito en la población en general, señala un comunicado.
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