Un estudio realizado en más de 35 comunidades de Oaxaca demostró que las y los productores carecen de información acerca de los transgénicos, informó Elena Lazo, del Instituto de Investigaciones Sociales de la Universidad Nacional Autónoma de México (IIS UNAM).
En entrevista, Lazo explicó que esta investigación fue desarrollada en comunidades de la mixteca, los mixes, Sierra Juárez y parte de la Chinantla, lo que reveló que 75 por ciento de los productores desconocen que son los transgénicos.
Aunado a ello, dijo la investigadora, 20 por ciento tiene una idea equivocada de los productos agrícolas modificados genéticamente al confundirlos con maíces híbridos, y sólo cinco por ciento conoce sus características, todos ellos de la Sierra Juárez.
Elena Laza consideró que esta situación representa un alto riesgo para la agricultura, ya que esa situación puede ser un mecanismo para introducir maíz transgénico a las comunidades, ya que alguna parte de lo que siembran y consumen proviene de otras comunidades.
Estimó que 70 por ciento de las semillas que manejan las y los agricultores procede de su cosecha anterior, pero un porcentaje siempre lo intercambian con sus vecinos o con gente de otras comunidades. Por lo que ante el desconocimiento se corre el resigo de sembrar maíz transgénico con efectos inesperados.
Otro de los problemas detectados en la investigación dirigida por Lazo en comunidades oaxaqueñas fue que las y los productores, así como las mujeres que elaboran tortillas, no saben la procedencia del maíz que se introduce a sus comunidades.
En el norte del país, añadió la investigadora universitaria, entre 40 y 45 por ciento de las y los productores tienen conocimiento sobre los transgénicos, «es decir, más de la mitad no saben, otros han oído hablar de algo así, pero realmente no saben».
Por último, dijo que los productores que tienen conocimiento sobre las semillas transgénicas fueron invitados por Monsanto, una corporación canadiense, para que conocieran sus «beneficios», sin embargo, fueron rechazados porque «el problema de México no era la producción, sino la distribución de sus cosechas».
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