El reto que tiene ante sí el candidato de la Alianza por México, Enrique Peña Nieto, para el periodo 2005-2011, no será nada fácil, ya que ofreció un cambio radical en la forma de hacer política en el estado, cuyos beneficios deberán favorecer en especial a las seis millones 689 mil 473 mujeres que viven en la entidad, de una población de más de 13 millones.
Durante los 75 días de proselitismo político en los cuales recorrió los 125 municipios del estado, asumió 608 compromisos firmados ante notario público, mismos que representan más de 9 mil millones de pesos, sin contar aún con la cuantificación de algunas ofertas de campaña como carreteras y sistemas de transporte colectivo.
Entre ellas, la instrumentación de un modelo de seguridad pública que permita tener una policía confiable, así como el impulso al desarrollo económico para la generación de empleos que favorezcan a las mujeres mexiquenses, renglón en el que prometió equidad laboral, eliminado en examen de ingravidez como requisito para ser contratada.
Además de la construcción, equipamiento y operación de guarderías para hijas e hijos de las mexiquenses trabajadoras y programas de capacitación para el trabajo dirigidos a madres solteras y la construcción de tres hospitales de primer nivel para atender la demanda estatal de salud; servicios médicos especializados para la atención de niños y mujeres; estancias infantiles y guarderías para hijos de las trabajadoras.
En materia educativa, Peña prometió seguro contra accidentes a todas las niñas y niños que cursen primaria en escuelas públicas; computadoras para todas las escuelas primarias y construcción y equipamiento de 10 unidades académicas de extensión universitaria.
EL OLVIDO
Sin embargo ni en la conferencia de prensa que ofreció pasadas las 22:00 horas de ayer ni hoy en las diversas intervenciones ante los medios de comunicación, mencionó que la formulación de sus políticas públicas tendrán una visión de género, tal y como lo pregonó en gran parte de su campaña política.
Una vez que el cómputo confirmó su triunfo irreversible, Peña Nieto reiteró únicamente que sus compromisos y propuestas fueron signadas ante notario, por lo que «el mayor reto que tengo es cumplir cada uno de los propósitos firmados». De acuerdo al próximo gobernador, «no buscaré excusas para justificar su incumplimiento, sino que en los hechos los haré cumplir»
El triunfo que lo convierte en el mandatario estatal 110 del estado, contó con el nivel de abstencionismo más marcado en la historia del estado, de casi el 60 por ciento. Con el 98.37 por ciento de la votación, de acuerdo al Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP), Peña Nieto se ubica con el 47.57 de la votación con un millón 730 mil 852 votos.
Rubén Mendoza Ayala, de la Alianza PAN-Convergencia y la candidata de la Coalición Unidos para Ganar, Yeidckol Polevnsky, se mantienen con el 24.76 y 24.09 por ciento de los sufragios.
2005/GV/GM
