El Hospital de la Mujer, inaugurado el día 8 de enero por Felipe Calderón Hinojosa en Cuernavaca, Morelos, al centro del país, aún se encuentra en obra negra y contará únicamente con 45 camas, muy pocas si se considera que pretende atender a 200 mil mujeres, como dijo la propaganda oficial, dijo María Luisa Becerril Straffon, Coordinadora General de Comunicación, Intercambio y Desarrollo Humano en América Latina (CIDHAL) y del Proyecto Políticas Públicas y Salud Sexual y Reproductiva.
En entrevista telefónica con Cimacnoticias, Becerril Straffon, mejor conocida como Mahua, señaló que las mujeres habían pugnado anteriormente por mejorar los otros hospitales de la Secretaría de Salud (SS) o los centros de salud comunitarios, pues es ahí donde existe más carencia de servicios de salud para prevenir «todo lo que implica que una mujer llegue a un hospital de especialización a veces a morirse, según los casos».
Para Mahua, al hospital aún le falta mucho, «no pueden inaugurar algo que no esta terminado» dice, pues su principal objetivo es cubrir casos sobre los distintos tipos de cáncer de mujeres y cosas más especializadas, como el virus de papiloma.
«Pero no podemos saber si va a haber presupuesto o no. De hecho, actualmente hay una gran carencia presupuestal y es muy prematuro inaugurar lo que es parte de una política nacional y seguramente estatal»
Y señala que no todas las organizaciones de mujeres creían conveniente que hubiese un hospital de la mujer, debido a que las necesidades de la población femenina radican en la carencia de servicios de salud de calidad y cercanos a su comunidad, pues no hay servicios de salud las 24 horas, sino que sus horarios son únicamente de 8 de la mañana a tres de la tarde.
Por eso implica un arma de dos filos, ya que tiene sus ventajas y desventajas: «hoy en día las mujeres con embarazos de alto riesgo están siendo canalizados a destiempo a los 5 hospitales de la SS que existen dentro de la entidad.
Entonces llegan a esos hospitales en condiciones de riesgo, no hay camas suficiente y tal vez el hospital de la mujer venga a sustituir esas carencias, pero por otro lado puede repetirse la atención tardía», indica.
A decir de Mahua, la trascendencia del hospital, de tercer nivel, radica en que puede aligerar la carga de los 5 hospitales en Morelos, toda vez que «hemos avanzados en la atención al aborto legal en los hospitales de salud pública. Entonces como es un hospital de la mujer se pueden atender estos casos específicos de las mujeres y de riesgo o de urgencia, ya que en otros hospitales están saturados y/o mal atendidos,
El buen funcionamiento del hospital, hoy apenas en obra negra, depende del presupuesto que se le otorgue, el tiempo que se dedique para terminarlo y la calidad de la atención que brinde.
De acuerdo con Mahua, la directora del hospital, la pediatra Ludmila Vité, «es una médica muy sensible y creativa, creadora del programa Canguro para niños prematuros, y quién ha apoyado cuestiones de capacitación y atención a la violencia contra las mujeres. Es muy profesional, tiene una excelente perfil, por lo que sería la mejor opción y una buena oportunidad para el hospital».
07/HVR/GG
