El recién aprobado Código Penal para el Distrito Federal sí garantiza los derechos de las mujeres, además de que están protegidos por los tratados internacionales en la materia; aseguró el presidente del Tribunal Superior de Justicia del Distrito Federal (TSJDF), Juan Luis González Alcántara.
Desde su punto de vista, la nueva legislación penal para esta capital «es un acierto» porque protege a las mujeres en sus derechos sexuales, reproductivos y civiles.
Asimismo, reiteró el magistrado, esas garantías para la población femenina capitalina también están respaldadas por los tratados internacionales que México ha suscrito; por lo mismo sugirió que –ante posibles inconsistencias en el nuevo código– tales ordenamientos resolverán eventuales controversias legales, toda vez que su jerarquía es superior a las leyes locales y federales.
Entrevistado por cimacnoticias luego de su intervención en la presentación del libro Cuerpo y derecho: legislación y jurisprudencia en América Latina, organizado en la Casa Lamm, en esta ciudad, González Alcántara confió en que al conocer las observaciones de juristas destacados, seguramente tanto el jefe del gobierno capitalino, Andrés Manuel López Obrador, como la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) modificarán algunos delitos (como el de peculado) antes de que entré en vigor del código.
Al mismo tiempo desestimó las críticas de los organismos de derechos humanos, como Amnistía Internacional, los cuales objetaron los artículos referentes a la tortura «por no estar perfectamente regulados».
Para él pasa lo mismo con los derechos de las mujeres, por lo mismo insistió en que las normas internacionales que México ha suscrito en materia de derechos humanos obligan a las autoridades locales y federales a castigar la tortura en todas sus formas.
Por su parte, la subprocuradora de atención a víctimas del delito y servicios a la comunidad del Distrito Federal, Bárbara Illán, destacó en breve entrevista que el nuevo Código Penal «es un avance» en cuanto a la protección de los derechos de las mujeres; pero, advirtió, se puede perfeccionar en cuanto a los delitos por acoso sexual y violencia intrafamiliar, los cuales «no están bien estructurados».
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