Con el mediometraje Nosotras también, la cineasta Mari Carmen de Lara dejó claro que la trama de la película -Sida en mujeres-, va más allá de ser una simple estadística para ser considerada como un problema de salud pública.
«Hoy lamentablemente sabemos que el VIH-Sida vuelve a golpear a grupos homosexuales de hombres, pese a que sabemos que la enfermedad no tiene que ver con las preferencias sexuales, sino con la información, la prevención y la protección».
Dentro de las y los infectados, las mujeres representan el 16.2 por ciento (14 mil 606 mujeres) de los 90 mil 43 infectados en todo el país. El grupo de amas de casa y migrantes es el más numeroso, situación que se vuelve un grave riesgo para el país, pues «vivimos en un Estado que aunque aparentemente es laico no ha hecho un trabajo real de difusión del uso del condón por toda esta presión que ejerce la jerarquía católica».
Aunado a ello, dijo, está el hecho de que las mujeres no obligamos a nuestras parejas a utilizar protección, pues detrás de ello hay una educación sexual deficiente que se conjuga con un machismo exacerbado en donde predomina el «tú eres de mi propiedad y en la relación sexual sólo mando yo».
Basada en hechos reales, la cinta nominada al Ariel en 1995 retrata la vida de un grupo de mujeres, en su mayoría amas de casa, que fueron contagiadas con el virus por sus parejas y no se dieron cuenta sino hasta que su compañero falleció o bien él les confesó su enfermedad a raíz de la muerte de uno de sus hijos.
Durante la transmisión de la cinta, realizada en 1994 en las instalaciones de la organización Semillas, que dirige Emilienne de León, la cineasta reconoció que la producción de estos materiales es provocar la discusión y, sobre todo, crear conciencia a la población del peligro que en este caso representa el VIH/Sida aun cuando el grave riesgo lo representa la difusión del material, porque información es poder.
Para la cineasta, quien ha trabajado en varias ocasiones con poblaciones indígenas para difundir en su lengua el uso del condón, la desinformación e ignorancia son las que dan paso a un mayor contagio del virus. «Hay quienes se niegan a utilizar el condón pues están seguros de que a ellos no les va a pasar, cuando hemos visto que la enfermedad se da a todas las edades, niveles y clases sociales».
La también directora y productora de cine y video, autora de Las velas de las auténticas intrépidas buscadoras del peligro, ha concentrado su trabajo en la difusión y capacitación de grupos de mujeres apartadas de núcleos urbanos o de bajos recursos, actividad en la que destaca por su producción de videos y formación de realizadores de extractos étnicos en el interior de la República Mexicana.
De acuerdo al Consejo Nacional para la Prevención y Control del VIH/Sida, a noviembre del 2004, el 97.5 por ciento (86 mil 875) de las y los infectados es mayor de 15 años y de ellos el 93.1 contrajo el virus por transmisión sexual.
2005/GV/GM
