La Organización Internacional del Trabajo (OIT), recomendó a gobiernos, empresas, trabajadores y sindicatos medidas para erradicar la violencia y el estrés en el sector servicios, que afecta más a mujeres solteras, separadas, viudas y divorciadas cuando en su entorno laboral predominan los hombres.
Con miras a su próxima reunión, que tendrá lugar del 8 al 15 de octubre en Ginebra, Suiza, donde un grupo de expertos analizará el proyecto de recomendaciones, la OIT advierte que las mujeres son más vulnerables a sufrir el impacto de estos dos fenómenos.
El texto de la OIT señala que las mujeres son más vulnerables a sufrir violencia y estrés, que aumenta también cuando deben compartir responsabilidades familiares o porque son blancos de determinado tipo de violencia como el acoso sexual.
La organización consideró que el estrés y la violencia pueden estar estrechamente vinculados a la discriminación y afectan a millones de trabajadores y trabajadoras en el mundo, causando daños tanto en el sector público como en el privado así como en un amplio espectro de profesiones y entornos laborales.
Esta problemática, según la OIT tiene varios efectos como días de trabajo perdido, aumento de medidas de seguridad de atención sanitaria, rehabilitación a largo plazo y costos sociales indirectos, lo que puede convertir el sitio de trabajo en un lugar peligroso.
Si bien el riesgo se puede presentar en todos los ámbitos laborales algunos sectores son más proclives, como la enseñanza, la salud, hotelería, espectáculos y el transporte.
RESPONSABILIDAD DE LOS GOBIERNOS
De acuerdo con la OIT las recomendaciones son dirigidas al sector servicios pero también son aplicables a otros como los manufacturero e industrial.
La larga lista de recomendaciones está encabezada por la responsabilidad de los gobiernos de sentar las pautas para combatir la violencia y reducir el estrés en el ámbito laboral.
Los gobiernos, dice la OIT deben reconsiderar los marcos normativos y revisar las legislaciones sobre salud y seguridad en el trabajo y destinar recursos con miras a la aplicación de medidas preventivas y eficaces de estos fenómenos.
Los gobiernos deben promover la atención a víctimas de la violencia y estrés laboral a través de programas públicos y velar porque esos problemas sea incluidos en los contratos colectivos de trabajo, agrega el documento.
La OIT sugirió a los empleadores evitar la violencia en los espacios laborales y prevenir el estrés excesivo y prolongado así como la adopción de políticas y prácticas que promuevan el respeto muto y la dignidad en el trabajo.
Les recomendó además evaluar constantemente los riesgos en el lugar de trabajo y adoptar disposiciones preventivas.
A los trabajadores y sus organizaciones sindicales pidió coadyuvar con los empleadores en el diseño de estrategias de evaluación y políticas adecuadas para prevenir los riesgos.
Además incluir en acuerdos nacionales, empresariales o del lugar de trabajo medidas de prevención y control de la violencia y el estrés; utilizar sus estructuras para difundir información preventiva y estudiar los factores que aumentan el riesgo para la elaboración de diagnósticos.
Entre las recomendaciones figuran el registro de las empresas con mayor número de incidentes violentos o bajas por enfermedad, así como la tipificación de situaciones y ocupaciones que entrañan riesgos.
El objetivo, aclaró la Organización Internacional del Trabajo, es eliminar a escala mundial el estrés y la violencia en los lugares de trabajo y dar soluciones prácticas a estos fenómenos que han invadido del mundo laboral.
2003/SM/MEL
