La Coordinadora Latinoamérica de Organizaciones Campesinas (CLOC) dio inicio a su III Asamblea Continental de Mujeres y a la II de Jóvenes con el objetivo de discutir las estrategias que utilizarán para lograr mayor incidencia en las políticas públicas de la región.
De acuerdo con el análisis realizado por las participantes, actualmente, en los 24 países de Latinoamérica, la situación en el campo es grave para ellas; sufren constantemente de explotación, discriminación salarial y violencia, sin que los gobiernos atiendan de forma específica sus problemas.
Durante la discusión, las lideresas latinoamericanas y caribeñas expresaron que es necesario trasladar sus conocimientos a la nueva generación para que la lucha que realizan sea continuada por la juventud. Las y los jóvenes, coincidieron las participantes, tienen un reto enorme porque los Estados no dan importancia a la solución de los problemas en el agro.
LA III ASAMBLEA DE MUJERES
María Elena Sequeira, coordinadora centroamericana de la CLOC, aseguró que durante la asamblea se realizarán talleres, foros y debates con el propósito de conocer la actual situación de las mujeres campesinas en Latinoamérica, así como para definir las estrategias organizativas que se realizarán con el fin de incidir en las decisiones en el ámbito local, nacional, regional y continental.
Por su parte, Nalú Faría, socióloga brasileña, dijo a Cerigua que el foro representa un avance significativo que permitirá fortalecer la capacidad de organización de las distintas representantas campesinas y renovar su compromiso de lucha para fortalecer el movimiento en el ámbito internacional.
A decir de Faría, la inclusión de las mujeres campesinas en las decisiones locales permitirá a los estados del continente americano y el Caribe conocer que ellas son capaces de cultivar, producir, administrar sus recursos y procurar el desarrollo económico no sólo de sus familias, sino de sus comunidades y países.
Es indispensable que las mujeres tengan conciencia de las desigualdades e injusticias por las que atraviesan al realizar su labor agraria; además, se deben entablar relaciones más equitativas con los funcionarios, ya que así ellas lograrán acceder a los créditos, a la propiedad de la tierra y a la comercialización para paliar su situación, aseveró la brasileña.
En el primer taller, las campesinas acordaron que deben defender los derechos de la niñez, contribuir a la beligerancia de la juventud y hacerle saber a los gobiernos que ellas son sujeto de transformaciones positivas de desarrollo.
LA II ASAMBLEA DE JOVENES
Juan Tiney, secretario general de la CLOC en Guatemala, señaló que el principal objetivo de la reunión de la juventud es revisar su plan de trabajo y fortalecer a este sector como el relevo generacional que librará las luchas campesinas en el futuro.
Tiney aseveró que es difícil encontrar a jóvenes que muestren interés por defender los derechos de las y los campesinos, ya que la cultura neoliberal y las actividades de las ciudades ofrecen otras alternativas socioeconómicas que aparentemente mejoran su situación.
Fredy Congo, líder juvenil ecuatoriano, dijo que una de las prioridades para la CLOC es procurar la educación de la juventud, ya que de esa forma se lograrán vencer los retos de la globalización e incidir de forma estratégica en la creación de políticas públicas locales.
La alienación, principalmente promovida por los medios de comunicación, no permite que la juventud campesina conozca los beneficios de la labor en el campo y que ignore cómo contribuir a la economía de sus países; se necesita hacer conciencia en las y los jóvenes sobre la cultura del campo, concluyó Congo.
Las asambleas de mujeres y jóvenes se llevan a cabo en el marco del IV Congreso de la CLOC, que dará inicio el próximo domingo y finalizará el miércoles 12 con la realización de la Marcha Continental Resistencia de los Pueblos, en la que participarán hombres, mujeres y jóvenes de los 24 países latinoamericanos y del Caribe.
05/YT
