Ser pobre, analfabeta y no tener acceso a los servicios de planificación familiar condena a las guatemaltecas, principalmente a las indígenas, a tener el mayor número de hijos en Centroamérica.
En este país, donde el 60 por ciento de sus 12 millones de habitantes corresponde a población autóctona, las mujeres mayas se embarazan hasta 6,1 veces en su vida, lo que contrasta con las no indígenas, quienes ingresan a la sala de parto sólo 3,7 veces en toda su vida, difundió hoy Semcuba.
El número de nacimientos en las guatemaltecas supera a los de El Salvador, donde el promedio oficial es de 3.34 hijos; Honduras, con 4.15, Nicaragua, con 3.18 y Costa Rica, con 2.5.
Según la Organización no Gubernamental Asociación Pro Bienestar de la Familia (APROFAM), la situación de embarazos en esta nación, en especial en el mundo maya, se debe en parte a que en el área rural predominan la pobreza y el analfabetismo.
Estadísticas del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) indican que en este país 6.4 millones de habitantes viven en estado de pobreza y un millón 800 mil en pobreza extrema.
Otros datos, esta vez de la Secretaría General de Planificación, señalan que el 28 por ciento de la población guatemalteca nunca ha accedido a una escuela, el 40 por ciento de su población rural es analfabeta y sólo 6.5 ha recibido educación secundaria.
A ello se agregan las creencias culturales inculcadas durante la niñez en la etnia maya. Para los habitantes de esas comunidades, cuya vida se rige por la cosmovisión y la creencia en varios dioses, evitar un embarazo es ofender a las deidades.
En su informe «Diversidad Étnico-cultural: la ciudadanía en un Estado Plural», el PNUD señala que de 82.6 por ciento de mujeres indígenas que conocen un método moderno de anticoncepción, solamente 23.1 lo utilizan.
El Ministerio de Salud Pública confirmó que los embarazos en Guatemala se inician apenas llegada la adolescencia. Aquí, por cada dos mujeres adolescentes, una está embarazada o ha sido madre antes de cumplir 20 años de edad.
Pero traer niños al mundo indiscriminadamente también tiene sus consecuencias. La mortalidad infantil es una de ellas. Hoy día Guatemala está por encima del resto de las naciones de Centroamérica en el listado de muertes en infantes.
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