En el Día Mundial de las Mujeres Rurales, el Instituto de las Mujeres del Distrito Federal (Inmujeres-DF) reconoció la importante labor y aportaciones en el ámbito de la economía, medio ambiente y preservación de la diversidad cultural que realizan 12 millones de mujeres rurales en el país, que representan la cuarta parte de la población femenina.
Las mujeres que viven en el ámbito rural juegan un papel importante en el desarrollo de sus comunidades; sus labores están relacionadas con la preservación del medio ambiente, el sostenimiento de los hogares mediante actividades extradomésticas, así como la realización de tareas del hogar; sin embargo, sus condiciones de vida no son óptimas y se enfrentan con frecuencia a la discriminación y a la violación de sus derechos.
Cifras del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) indican que el promedio de escolaridad de las mujeres rurales de 15 años y más es de 4.6 años. De cada 100 mujeres de 15 años y más, 20 no tiene instrucción, 33 tienen la primaria completa, 24 concluyeron la primaria, 16 cuentan con algún grado de secundaria, 5 lograron concluir al menos un año en el nivel superior y sólo 2 tienen algún grado aprobado en estudios superiores.
Además, 7.3 por ciento de las niñas de 6 a 12 años no asiste a la escuela, proporción que aumenta a 36.7 por ciento en las adolescentes de 13 a 15 años.
Las mujeres del medio rural inician más temprano el ciclo reproductivo y tienen en promedio más hijos que las mujeres de localidades urbanas. Según el último censo general del 2000, en promedio las mujeres rurales de 12 años y más tenían un hijo más que las que residen en zonas urbanas.
En las mujeres rurales se observan porcentajes de anemia más altos que los de las residentes urbanas. Causas evitables como los accidentes, enfermedades del hígado, deficiencias nutricionales, influenza y neumonía, bronquitis, enfisema y asma, enfermedades infecciosas intestinales, anemias, complicaciones del embarazo, parto y puerperio, úlceras gástricas y duodenal y tuberculosis pulmonar son más frecuentes en las localidades rurales.
URGEN POLÍTICAS PÚBLICAS
En el medio rural, cuatro de cada diez mujeres ocupadas son asalariadas, tres trabajan por su cuenta y una de cada cuatro no recibe ningún pago por su trabajo. La migración de los hombres en busca de trabajo y mejores oportunidades también ha afectado la vida de las mujeres rurales, quienes han asumido la responsabilidad de las labores agropecuarias y en muchas ocasiones la manutención total del hogar.
Ante esta situación, es urgente la implementación de políticas públicas que sean acordes con las condiciones y la identidad cultural de las mujeres rurales, tomando en cuenta su condición de género y sus derechos. Resulta fundamental respaldar sus exigencias de acceso a la posesión de la tierra, créditos y tecnología en el ámbito agropecuario; así como a la educación, el descanso, la salud y un trabajo dignamente remunerado.
Para hacer frente a estas demandas, en la Ciudad de México el Inmujeres-DF cuenta con el Proyecto Mujeres Productoras y Artesanas, que apoya a mujeres que desean emprender un negocio, muchas de ellas, mujeres rurales de delegaciones como Milpa Alta, Tláhuac y Tlalpan.
También con el Programa de Atención Integral al Cáncer de Mama, que recorre diversas colonias para brindar a las mujeres estudios gratuitos de mastografías. Realiza también acciones significativas en las dieciséis Unidades Delegacionales, a fin de mejorar la calidad de vida de las mujeres que habitan en zonas rurales del Distrito Federal, concluyó el comunicado de Inmujeres-DF.
08/VG/GG