Representantes de Organismos No Gubernamentales (ONG) denunciaron en el Encuentro Binacional de Mujeres Trabajadoras, Pobladoras y Promotoras Comunitarias, que el acoso sexual es uno de los principales problemas que enfrentan miles de mujeres que laboran en las maquiladoras de Tijuana.
En la reunión que se llevó a cabo en el centro comunitario El Aguascalientes ¡Zapata Vive! del poblado Maclovio Rojas al este de Tijuana las activistas de las ONG agregaron que este abuso con frecuencia no es reportado por las víctimas por el temor de perder su empleo.
De esta forma las representantes provenientes de México, Guatemala y Estados Unidos acordaron crear una red de información para documentar estos casos y otros de abusos padecidos por obreras, publicó hoy el diario La Jornada.
El acoso sexual ocurre tanto en las maquiladoras de Tijuana como en los talleres de costura ubicados en California, donde laboran alrededor de 50 mil mujeres en su gran mayoría inmigrantes, afirmó Connie García de la organización Colectivo Feminista Binacional.
«Hemos documentado casos de explotación similar en las maquiladoras y centros de costura de ambos lados de la frontera donde hay hostigamiento sexual, abuso de sus derechos laborales e inclusive tenemos testimonios de trabajadoras y trabajadores que afirman algunos de sus patrones les facilitan drogas para que soporten largas jornadas sin descanso», agregó.
Margarita Avalos, del Centro de Información para Trabajadoras y Trabajadores indicó que otro de los derechos que se violan en las maquiladoras es el referente a la salud, pues los empleados de estos lugares, en su mayoría mujeres, son expuestos a sustancias que afectan su organismo.
Este centro realiza labores de apoyo jurídico para trabajadoras que han sufrido algún tipo de abuso. Actualmente hay 19 demandas ante las autoridades laborales interpuestas por mujeres que se quejan de haber sufrido acoso sexual.
Avalos puntualizó que existe una complicidad entre las autoridades laborales, ya que no prestan atención a las demandas de las mujeres, un ejemplo es el de las ex trabajadoras de la fábrica de pantimedias Industria Fronteriza donde los procesos legales duraron hasta tres años.
Finalmente Carmen Valadez, representante del Colectivo Feminista Binacional, declaró que en el encuentro se trató de compartir diferentes experiencias organizativas y los problemas que desafían las mujeres trabajadoras, pobladoras y promotoras comunitarias en esta región fronteriza.
2004/HS/LR/SM
