El presidente de la Liga Campesina Coreana, Kyunghai Lee, de 56 años de edad, se suicidó hoy al clavarse un cuchillo que le perforó el pulmón izquierdo y el corazón, a sólo unos metros de este reportero.
El coreano fue conducido inmediatamente en una ambulancia al Hospital General de la ciudad, donde minutos después los médicos confirmaron su muerte.
El coreano participaba en el enfrentamiento entre agentes de la policía local y miembros del Estado Mayor Presidencial contra manifestantes, quienes intentaban derribar las vallas metálicas colocadas la mañana de este miércoles.
Luego de varios intentos fallidos por derribar las vayas metálicas resguardadas por agentes de seguridad pública, el campesino coreano se encajó un cuchillo, con el que se perforó el corazón.
La muerte del coreano ocurrió poco después de iniciada la marcha de protesta en la que participaron miles de personas que salieron de la Villa Campesina hacia el kilómetro cero que conduce a la zona hotelera donde se encuentra el Centro de Convenciones del World Trade Center, en el cual se reúnen ministros de Comercio de 144 países.
Un grupo de campesinos coreanos, al que pertenecía el suicida, cargaba un féretro de cartón negro al tiempo que intentaba derribar las largas vallas metálicas colocadas y resguardadas desde la mañana de este miércoles por agentes de seguridad pública y del Estado Mayor Presidencial.
En la manifestación que duró poco más de 3 horas, los inconformes se enfrentaron con palos, piedras y botellas contra la policía derribando la primera malla de contención colocada para impedir su ingreso a la zona hotelera.
En el primer día de sesiones, los miles de manifestantes enardecidos gritaban consignas como «Asesinos, Rateros», «No a la OMC», «Fuera OMC» y «Zapata Vive» contra los miembros de la OMC.
En la Macha de los Pueblos de la Tierra, como la denominaron algunos grupos, participaron campesinos de los movimientos Sin Tierra de Brasil, simpatizantes de la autonomía del País Vasco e indígenas del guerrillero Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), así como miembros del Consejo General de Huelga (CGH) de la UNAM.
Mientras en el kilómetro cero aún permanecían miles de estudiantes, campesinos globalifóbicos todos, amenazaron con realizar más protestas en los siguientes días mientras duré la reunión de la OMC en Cancún.
Por su parte la Policía Federal Preventiva (PFP) reportó al menos 19 policías heridos o intoxicados con una sustancia ácida arrojada por los globalifóbicos para contrarrestar la fuerza policíaca.
Tras el enfrentamiento cientos de policías permanecen alertas en los retenes colocados a lo largo del boulevard que conduce a la lujosa zona hotelera y donde se hospedan los participantes a la cumbre.
Por su parte los manifestantes regresaron en pequeños grupos a la Casa de la Cultura Cuxil Baxal, o también la Villa Campesina, y en las inmediaciones de la central camionera instalaron otro campamento.
2003/MC/MEL
