¿Te parece que tu sexualidad es un tema de poca importancia? Es la pregunta que Fernando Álvarez Vázquez —sexólogo, psicoterapeuta Gestalt, infantil, familiar y constelador— hace en un boletín del Centro Psicopedagógico de Juego Casa de Caritas, lugar donde trabaja y cuyo lema es «los problemas se resuelven jugando».
En algún momento de nuestra vida, dice, todas las personas hemos tenido algún problema sexual.
El inconveniente no es ése, opina, sino «la vergüenza con la que vivimos al reconocer alguna situación de esta índole, porque tenemos la creencia irracional de que siempre tenemos que responder impecablemente a las exigencias sexuales que nos marca la sociedad».
En estas exigencias es común el deber ser a partir de las palabra TIENES QUE: rendir al 100 por ciento; tener ciertas medidas o características físicas para ser considerada una persona «sexi»; aceptar toda propuesta sexual, aunque no la desees, o satisfacer siempre a tu pareja.
El peor «deber ser» es aquel que se relaciona con la premisa de que «tu eres responsable 100 por ciento de la satisfacción de tu pareja», señala Fernando Álvarez.
La respuesta del especialista a cada una de estas afirmaciones es un NO rotundo y para ello propone que hagas una reflexión y respondas a un cuestionario con 13 preguntas al que titula «¿Qué significará ser feliz con mi sexualidad?».
Analiza los siguientes puntos y observa si eres o no feliz con tu sexualidad:
1. Me gusta tener tiempo para disfrutar de mi sexualidad.
2. Soy consciente de cuáles son mis deseos y hábitos sexuales.
3. Mientras tengo relaciones sexuales evito pensar en mis problemas.
4. Para mí el sexo es una forma de estar en armonía con mi pareja, más que un mero desahogo físico.
5. Evito tener relaciones sexuales de riesgo, me cuido a mí misma o mí mismo.
6. En mis relaciones sexuales existe una comunicación profunda con mi pareja.
7. Cuando tengo un problema sexual con mi pareja procuro hablar del tema a tiempo y así evito que eso se haga más grave.
8. Si mi pareja quiere probar una práctica sexual que no me gusta, le digo asertivamente que NO.
9. Tampoco obligo a mi pareja a tener relaciones sexuales o alguna práctica sexual que no le guste, es decir, sé escuchar.
10. Me resulta fácil decirle a mi pareja lo que más me gusta en el sexo.
11. Me resulta fácil saber qué le gusta sexualmente a mi pareja.
12. Evito tener relaciones sexuales como si fuera un deporte o una obligación y al final sentirme vacía o vacío, y en cambio trato de establecer un vínculo sano conmigo y con mi pareja
13. Si no tengo pareja, me doy placer yo misma o mismo sin culpa.
Por último, Fernando Álvarez comenta:
«En realidad no existe un parámetro para saber tu grado de felicidad en el área sexual, eso más bien tú lo determinas, observa en cual de esos puntos diste una respuesta negativa y te recomendaría trabajarlos ya».
Los 19, 20 y 21 de mayo, Álvarez estará en el «Tercer Congreso Internacional de Psicosexualidad 2011: Amor y erotismo» y en el «Primer Encuentro Internacional de Diversidad Sexual 2011 conocimiento, responsabilidad y derecho», en Mazatlán, Sinaloa.
Dará tres conferencias magistrales con los temas: «Los pros y contras del matrimonio gay», «Soy hija o hijo de una pareja gay» y «Las redes sociales: un escaparate para las relaciones sexuales», e impartirá un taller.
Para mayores informes de estos eventos puedes consultar la siguiente liga www.grupolugar.com.mx. El correo es [email protected].
* Periodista mexicana, narradora oral, facilitadora de grupos, terapeuta con Enfoque Centrado en la Persona y Gestalt e instructora asociada del Sistema Tao Curativo.
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