Esmeralda, es una niña de cuatro días de nacida, su llegada iluminó la existencia de su madre desolada ante la desgracia que dejó el huracán Stan en Motozintla, comunidad de la Sierra del Soconusco.
La niña, nació en medio de los aguaceros de la semana pasada ocasionados por el huracán que arrasó decenas de comunidades de este municipio de la sierra, así como en la costa y frontera con Guatemala.
Su madre, Cecilia Aguilar Gómez, de 36 años, explicó que en el momento que las corrientes del río Xelajú arrasaron casas, carros, animales, sintió mucho miedo y comenzaron los dolores.
La niña nació la noche del viernes. Cecilia recibió ayuda de su madre Flora Gómez y algunas mujeres que se permanecen refugiadas en la escuela primaria Ignacio Zaragoza en la cabecera de este municipio de la sierra.
Esmeralda y su madre permanecen acostadas sobre un sucio colchón que lograron rescatar del agua. Celia llora porque no tiene comida ni agua desde hace días y conforme pasan los días esta más desesperada. Es más Esmeralda no ha sido bañada desde que nació.
Esta es una de las miles de historias que se han tejido con el paso de la tormenta Stan. Muchas de ellas llenas de tristeza, dolor y muerte en la zona de desastre de Chiapas.
Muy cerca de ellas, cientos de desesperadas mujeres se arremolinaron durante el aterrizaje de dos helicópteros del gobierno mexicano con ayuda humanitaria para repartir entre los damnificados.
El alcalde, José Ulises Zapata, dice que el municipio perdió el 70 por ciento de la infraestructura urbana. Y decenas de comunidades permanecen en completa incomunicación. Al menos 11 personas murieron en comunidades de este municipio durante el paso de Stan.
Sin embargo, el comisariado ejidal, Rafael González González, dijo que en Belisario Domínguez, al norte del municipio, 15 personas están sepultadas desde la semana pasada. Señaló que un alud de tierra los sorprendió cuando dormían sin que tuvieran la mínima oportunidad de escapar.
Según él, en otras comunidades aledañas a la suya podría haber más personas fallecidas o sepultadas.
El Gobierno chiapaneco reconoce de momento 29 personas muertas en el estado y un número no determinado de desaparecidos que podrían encontrase en el lodo a debajo de escombros.
05/MC/SJ
