El Movimiento Amplio de Mujeres (MAM) de Oaxaca demandó garantías laborales para Rosalba Cantera García, quien denunció al dirigente sindical Oliverio Neri López, por acoso sexual, intento de violación y abuso de autoridad.
En un comunicado pidieron que este caso no se utilice con tintes políticos, ni medien intereses económicos, ya que existe la posibilidad de que la víctima sea despedida de su trabajo y que la balanza de la justicia se incline hacia el sindicalista.
Las organizaciones que se inscriben en el MAM pidieron al gobernador oaxaqueño José Murat vigilar que prevalezca el estado de Derecho, al destacar su compromiso con las mujeres y solicitarle que se actúe con celeridad en este caso y no quede impune.
También reiteraron que tanto el acoso sexual, el intento de violación o la consumación de la misma y el abuso de autoridad son actos que transgreden las leyes y los derechos humanos, al igual que el despido injustificado.
Calificaron de grave e inmoral la acción del secretario general del Sindicato de Trabajadores al Servicio de los Poderes del Estado e Instituciones Descentralizadas de Carácter General del Estado de Oaxaca, «máxime que fueron cometidos una persona de la cual se espera la defensa a las trabajadoras y trabajadores».
A la fecha existen denuncias sobre el caso ante la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) y ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), mismas que deben ser atendidas con celeridad, trasparencia y rendición de cuentas claras, consideraron las activistas.
«No podemos permitir que una vez más una compañera trabajadora viva la incertidumbre de ser separada de su fuente de empleo e ingresos, de ser blanco de amenazas ella y su familia, sólo por armarse de valor y atreverse a denunciar públicamente y ante la Procuraduría actos que hablan de discriminación y de uso y abuso del poder», puntualizaron.
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