La dura y peligrosa situación de las y los niños que trabajan en las minas y canteras, que a menudo ponen en grave riesgo su salud y seguridad, será el foco de la cuarta edición del Día Mundial contra el Trabajo Infantil, programado para el 12 de junio de 2005, anunció hoy la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
La OIT estima que cerca de un millón de niños, niñas y adolescentes trabajan en minas artesanales y canteras alrededor del mundo. Los estudios de la Organización demuestran que estos menores trabajan en las peores condiciones imaginables, haciendo frente al riesgo de morir en el trabajo o de sufrir lesiones y problemas de salud que los afectarán a lo largo de sus vidas.
Tanto en minas subterráneas, como de superficie, los infantes trabajan largas horas, llevan cargas pesadas, manejan explosivos, ciernen arena y piedras, se arrastran en túneles estrechos, respiran polvo dañino y trabajan dentro del agua -a menudo contaminada con peligrosos tóxicos como plomo y mercurio- declara la OIT.
Los niños y las niñas trabajan en minas de diamantes, oro y otros metales preciosos en África; de gemas y en canteras en Asia y de carbón, esmeraldas, estaño y oro en América.
En canteras localizadas en muchas partes del mundo, las y los niños además de arrastrar cargas pesadas, respiran polvo y partículas contaminantes y usan peligrosas herramientas y equipos para el triturado de piedras y minerales, que los exponen a graves accidentes que afectan su seguridad y su salud.
La experiencia del Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil (IPEC) de la OIT en proyectos piloto en Bolivia, Colombia, Ecuador, Mongolia, Níger, Perú y Tanzania, demuestra que es posible eliminar el trabajo peligroso que realizan los niños y las niñas.
El organismo de la OIT explicó que para ello es necesario ayudar a las comunidades mineras a adquirir derechos legales, organizarse en cooperativas u otras unidades productivas.
Además de mejorar la salud, seguridad en el trabajo y la productividad de los trabajadores adultos y asegurar servicios esenciales tales como educación, salud, agua potable y saneamiento en estas comunidades situadas a menudo en zonas muy alejadas.
Cabe señalar que la OIT lanzó el Día Mundial contra el Trabajo Infantil en junio de 2002, para dar visibilidad al problema de la explotación infantil y destacar el movimiento global para eliminar esta práctica, particularmente sus peores formas.
Este año, el 12 de junio y alrededor de esa fecha, se espera que las organizaciones locales, nacionales y los grupos de niños, niñas y adolescentes se unan a los esfuerzos de la OIT alrededor del mundo.
Así como a las actividades que se llevarán a cabo durante la Conferencia Internacional del Trabajo en Ginebra para celebrar el Día Mundial y reclamar el retiro inmediato de los niños, niñas y adolescentes que están trabajando en las minas artesanales.
2005/SJ