Un estudio cuestiona el tratamiento de la violencia doméstica en los medios de comunicación. La mayoría de noticias se limitan a informar del «suceso» desde un punto de vista negativo y poco constructivo, y en muchos casos contribuyen a construir estereotipos sexistas, según un estudio de Proyecto Malva en Valencia.
Analizar cómo abordan los medios de comunicación el tema de la violencia doméstica; identificar los elementos que distorsionan o hacen cuestionable la cobertura de esta problemática social y proponer recomendaciones para que los periodistas la traten de forma adecuada son los objetivos del estudio.
La investigación es realizada por Proyecto Malva, un programa preventivo de la Fundación Salud y Comunidad sobre violencia doméstica asociada al alcohol, del cual ya se han hecho públicas las principales conclusiones.
Para llevar a cabo el informe se ha analizado un total de 424 noticias sobre violencia contra la mujer aparecidas en enero del 2003, mayo del 2003 y 2004 en tres periódicos valencianos (Levante, Las Provincias, Información) y en las secciones de la Comunidad Valenciana de El País y El Mundo, según informa Canal Solidario.
A pesar del notable aumento de artículos publicados sobre este tema que constata el estudio (en mayo de 2004 se triplicó el número en relación al mismo mes del año anterior), las mayoría de informaciones (71%) son breves, por lo que no permiten tratar a fondo las causas que provocan este problema y aportar una visión más preventiva. «Una mayor cobertura no implica una mayor conciencia sobre esta realidad. No sólo se trata de informar, sino de educar a la población respecto a las causas y efectos de la violencia contra las mujeres», advierten los autores del estudio.
El informe también concluye que muchas de la noticias analizadas contienen elementos que contribuyen a construir estereotipos sexistas, explicaciones que intentan justificar la conducta violenta del hombre y expresiones que perpetúan roles tradicionales de género.
«Es importante acabar con la narración de la violencia como crimen pasional, ya que esto permite justificar la violencia a través de una explicación amorosa y emocional y oculta la razón primordial por la que se mantienen dinámicas violentas: la desigualdad de poder», afirman desde Proyecto Malva.
UN ENFOQUE CONSTRUCTIVO
El tratamiento de la violencia de género desde un punto de vista negativo (64% de los artículos), vinculándolos a la sección de Sucesos y haciendo referencia a asesinatos y agresiones, es otra de las principales críticas de este informe. Frente a ello, desde Proyecto Malva consideran que se deben potenciar los aspectos positivos dando a conocer los recursos y servicios especializados (asesoramiento jurídico, centros de emergencia o acogida) y las experiencias de mujeres que han rehecho su vida. «No se puede limitar el problema a la extensión final de la violencia. Son necesarios el seguimiento y la opinión de personas expertas para evitar informaciones sesgadas».
Los autores también lamentan la «invisibilidad del alcohol vinculado a la violencia doméstica en las noticias», una causa que sólo se menciona en 3.8 por ciento de los artículos «a pesar de que numerosos estudios científicos avalan que al menos en un 50 por ciento de los casos» de violencia contra la mujer existe un abuso del alcohol.
RECOMENDACIONES PARA PERIODISTAS
Próximamente, los autores de la investigación harán también públicas recomendaciones para que los periodistas aborden este tema de forma más adecuada. De hecho, éste es uno de los colectivos a los que desde sus inicios se ha dirigido Proyecto Malva, debido al papel clave de los medios de comunicación a la hora de dar a conocer y hacer visible esta problemática social.
Desde el programa se ha desarrollado también una serie de artículos y un dossier informativo sobre la vinculación entre el abuso del alcohol y la violencia de género. En la misma línea, el próximo 22 de noviembre se llevará a cabo en Valencia una conferencia dirigida a estudiantes y profesionales del periodismo sobre el tratamiento de este fenómeno.
Además de estos materiales, la organización ha publicado dos guías para ayudar a los profesionales sociosanitarios y de drogodependencias a detectar los posibles indicios de violencia y su relación con el alcohol, junto con otros documentos para sensibilizar, informar y educar a potenciales víctimas, agresores y población en general.
05/YT
