En un logro de las organizaciones civiles de mujeres, la Norma Oficial Mexicana (NOM-041) para la atención del cáncer de mama (CaMa) -que esta semana publicará la Secretaría de Salud (Ssa)- garantiza la «universalización» de la mamografía de tamizaje a partir de los 40 años de edad con el fin de detectar de manera temprana la enfermedad y evitar así miles de muertes al año.
Las mujeres de 40 años y más tendrán derecho a realizarse una mastografía de tamizaje anual sin indicación médica, informó en entrevista exclusiva con Cimacnoticias Mauricio Hernández Ávila, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud.
El funcionario de la Secretaría de Salud (SSa) señaló que luego de una amplía discusión, la NOM-041 incluyó las observaciones de organizaciones que luchan contra el CaMa y de algunas sociedades médicas que argumentaron la importancia de la universalización de la mastografía.
Hernández Ávila indicó que la norma se aprobó por consenso y se publicará esta semana. Detalló que la normatividad para la prevención, diagnóstico, tratamiento, control y vigilancia del cáncer de mama ahora establece que las mujeres de 40 a 69 años de edad podrán realizarse una mastografía de tamizaje sin necesidad de una indicación médica.
La NOM-041, publicada en 2002, sugería que las mujeres de 40 a 50 años pasaran a consejería técnica antes de practicarse la mamografía de tamizaje, que sólo se práctica a las «aparentemente sanas»; este apartado se eliminó de la norma actual.
El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud de la SSa indicó que la norma «marca el ideal a lo que queremos llegar como sistema de salud», sin embargo –apuntó– todavía no hay «suficiente número de radiólogos, ni de técnicos radiólogos, ni de mamógrafos».
La norma plantea cómo se deben expandir los servicios «para que conforme crezcan las inversiones, vayamos cumpliendo la norma».
Como lo adelantó a Cimacnoticias, Begoña Zabalza, de la Coalición Mexicana por la Salud Mamaria (Comesama), la norma plantea que las instituciones de los estados deberán informar periódicamente acerca de la ampliación de sus servicios para la detección del CaMa.
«ALTERNATIVAS» ANTE DÉFICIT DE CAPACIDAD
En tanto aumentan la inversión y la efectividad de los servicios, Hernández Ávila mencionó que «lo que se ha sugerido es el servicio subrogado de mamografías», que consiste en que los estados utilicen fondos del Seguro Popular para contratar laboratorios privados, que estén acreditados por la SSa.
En su opinión, la subrogación de estos servicios es viable y ha dado «resultados» favorables. Muestra de ello es que cumplieron el tamizaje de 21.7 por ciento de las mujeres mayores de 50 años, que era la meta propuesta para 2012.
Las entidades que han utilizado esta modalidad son el DF, Puebla, Aguascalientes, Veracruz, Sinaloa, Hidalgo, entre otros.
Cabe mencionar que de las mujeres mayores de 40 años sólo entre 8 y 10 por ciento se practicó una mastografía de tamizaje durante el último año.
De acuerdo con Mario Gómez Zepeda, encargado del programa de CaMa del Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva (CNEGYSR), de la SSa, para impactar en la mortalidad por este cáncer la cobertura para las mujeres de ambos rangos de edad (40-49 y 50-69) debe ser de 70 por ciento.
El CaMa representa la primera causa de fallecimientos por tumores malignos entre las mujeres mayores de 25 años; por esta enfermedad murieron en el país 5 mil 113 sólo en 2010.
Con la NOM-041, a pesar del déficit de las instituciones de salud de los estados, las entidades federativas estarán obligadas a garantizar el servicio a las mujeres de 40 años y más, por lo que además de la subrogación de servicios pueden replicar modelos de atención como los de la Ciudad de México.
Un ejemplo de ello es que el Instituto de las Mujeres del DF y la Secretaría de Salud capitalina utilizan por las tardes el área de diagnóstico del Instituto de Cancerología (Incan) como unidad de detección temprana, donde se realizan 90 mamografías diarias.
COMPROMISO LEGISLATIVO CONTRA EL CAMA
Tras la «importante» discusión de la NOM-041, Mauricio Hernández señaló que la Comisión de Equidad de Género de la Cámara de Diputados se comprometió a pugnar por un presupuesto mayor que fortalezca el programa de CaMa.
Cabe recordar que el presupuesto a nivel nacional invertido para atender la problemática, ha crecido de manera importante en los últimos 3 años (2007-2010): de 800 millones de pesos pasó a mil 200 millones de pesos.
El Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva (CNEGSR), donde se encuentra el programa de Cama, recibió en 2010, 196 millones de pesos.
De igual modo, con la NOM-041, los institutos Mexicano del Seguro Social (IMSS) y de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado (ISSSTE) «también tienen que hacer una mayor inversión de la actualmente se destina contra la enfermedad», concluyó Hernández Ávila.
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