El Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) promueve un plan piloto de planificación familiar en Petén, que consiste en colocar implantes a las mujeres que deseen espaciar los embarazos hasta por cinco años.
De acuerdo con la información de elPeriódico, en ese departamento desde hace seis meses un grupo de 230 mujeres cambió de método anticonceptivo y ahora son usuarias del implante subdérmico, que se coloca con una pequeña incisión que no tiene mayor cuidado.
Según la publicación, el Programa de Salud Reproductiva adquirió recientemente un mil 500 dispositivos y ha tenido gran aceptación entre la población femenina pues antes utilizaban mayormente el inyectable, que era más caro.
A decir del Ministro de Salud, Celso Cerezo, en los próximos días se enviarán este método de planificación a los centros de Alta Verapaz e Izabal para que las mujeres puedan optar por éste.
Finalmente, la Asociación Pro Bienestar de la Familia (Aprofam) promueve los implantes desde hace seis años y han dado muy buenos resultados entre las usuarias, quienes no tienen que acudir seguido a centros de salud, pues su eficacia dura hasta cinco años.
QUICHELENSES DEMANDAN SALUD REPRODUCTIVA
Por otro lado, en Quiché, informa el corresponsal Héctor Javier Tecúm, la Red departamental de organizaciones de mujeres indígenas por la salud reproductiva de ese departamento exigió a las autoridades municipales y departamentales el mejoramiento en la atención salubrista para la población femenina y así evitar el aumento en las muertes maternas.
Durante un foro donde la entidad presentó sus demandas, Anastacia Pacheco, integranta del Comité de Mujeres Las Estrellas de Chinique, dijo que se debe asegurar el acceso de las mujeres indígenas a los servicios de salud reproductiva con un enfoque intercultural y respeto a la dignidad de los pueblos.
Pacheco pidió al Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) actuar para eliminar las inequidades en la cobertura de la salud, que se reportan principalmente en las zonas rurales y en las poblaciones mayoritariamente indígenas.
Entre las demandas presentadas por la Red está elevar el nivel de inversión en salud reproductiva, además de hacer mayor énfasis a la labor que realizan las comadronas y que sean tomadas en cuenta como parte importante del sistema salubrista.
Durante la actividad, las lideresas mostraron su descontento por la ausencia de las principales autoridades del departamento, que habían confirmado su participación, entre ellas el Gobernador departamental, directores del Área de Salud y del Hospital Nacional, así como el presidente de alcaldes municipales.
La Red departamental de organizaciones de mujeres indígenas por la salud reproductiva es una instancia que vela por el cumplimiento de las políticas públicas en salud y cuenta con el apoyo del Observatorio en Salud Reproductiva (OSAR).
Finalmente, Liliana García, secretaria del OSAR, dijo que en lo que va del año el 100 por ciento de muertes maternas es de mujeres indígenas, un aspecto preocupante al que las autoridades deben ponerle la atención necesaria para erradicar dicho flagelo.
09/GG
