Ante una oleada de inquietantes amenazas, Obtilia Eugenio Manuel, fundadora de la Organización del Pueblo Indígena Tlapaneco (OPIT) en la militarizada zona de la Montaña de Guerrero viajó a México para hacer una denuncia pública hoy.
En conferencia de prensa en el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, la defensora, traductora y compañera de las tlapanecas Valentina Rosendo e Inés Hernández –quienes denunciaron en en marzo del 2002 la violación a manos de militares –, detalló las amenazas más recientes a su persona y hogar, correspondientes al 9 de diciembre y 18 de enero pasados.
«Obtilia Eugenio Manuel, mira ya se te olvido de lo que esiste (sic) a mi compañero del charco» dice en alusión a las denuncias sobre la masacre del Charco la hoja que dejaron bajo la puerta de su casa en Ayutla de los Libres, punto de confluencia de algunos de los más conflictivos municipios de Guerrero.
«…ahora te vamos cumplir con tu fiesta tu lo buscaste te vamos dar gusto que te olvidaste de lo que dijiste», continúa el anónimo al referirse a amenazas anteriores donde la fiesta se realizaría en un panteón.
Pese a que hoy Obtilia cuenta con una recomendación para tener medidas precautorias emitida por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), el anónimo promete continuar la vigilancia: «Tu sigue dando duro golpe a nosotros sigue con tu mentira de violación valentina y Inés ya basta estupideces de lo que nos hechas, ya te vamos dar gusto de por sí tenia hambre gusano de ti muy pronto descansar en paz.»
A partir de esa fecha, Obtilia, su hermana Andrea Eugenio Manuel y su esposo Cuauhtémoc han sido objeto de intimidación por parte de sujetos extraños que continuamente merodean en su domicilio particular y en las instalaciones de la oficina de la OPIT, detalla el Prodh, conjuntamente con el Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan y la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (Wola).
Las organizaciones arriba mencionadas han dado seguimiento a los casos que fueron abrazados por la CIDH y Amnistía Internacional, mismas que reconocen el papel fundamental de Obtilia «en el fortalecimiento del ánimo de justicia de las dos mujeres indígenas.»
Por ello, este mediodía las organizaciones llamaron al gobierno mexicano a adoptar las medidas necesarias para garantizar la vida y la integridad física de Obtilia Eugenio Manuel y su familia, incluyendo su esposo y sus dos hijas pequeñas.
2005/MR
