La Red Latinoamericana de Trabajadoras Sexuales (RedTraSex) inauguró un foro de discusión en Internet con el fin de facilitar el intercambio de ideas entre todas las personas que trabajan por el mejoramiento de la vida en ese sector.
El foro, ubicado en el sitio web www.redtrasex.org.ar/forum, contó con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para la lucha contra el Sida (ONUSIDA), la Cooperación Alemana para el Desarrollo del Ministerio de Salud de Alemania (GTZ) y AIDS Alliance, informó la presidenta de la red Elena Reynaga.
Género, legislación y derechos son algunos de los temas abiertos al debate en Internet. La nueva opción coincidió con la celebración, el 2 de junio, del Día Internacional de las Trabajadoras Sexuales.
«Invitamos a todos y todas los que colaboran y se interesan en nosotras, a compartir este espacio para poder enriquecernos y conocer sus opiniones», afirmó Reynaga, quien también preside la Asociación de Mujeres Meretrices de la Argentina (AMMAR) y trabaja intensamente por la defensa de los derechos de sus compañeras.
Para Reynaga el valor del nuevo foro de discusión consiste en que «lo más valioso» que tienen aquellas personas que intentan «una búsqueda constante de un mundo mejor, es la herramienta de la comunicación democrática y respetuosa».
RedTraSex está integrada por personas de Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Ecuador, El Salvador, Guatemala, México, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay.
RECORDANDO EL 2 DE JUNIO
El 2 de Junio de 1975 unas 150 trabajadoras sexuales ocuparon la Iglesia de St. Nizier en Lyón, Francia, para protestar por la situación de violencia que sufrían. El pueblo protegió y apoyó la protesta de las mujeres y la huelga se empezó a extender por otras ciudades como Marsella, Montpellier, Grenoble y París.
«El reclamo surgió porque se sucedían los asesinatos de trabajadoras sexuales, la policía las reprimía con más dureza, poniéndoles multas y deteniéndolas con el pretexto de que ‘luchaban contra el rufianismo’, pero se descubrió que altos jefes policiales de Lyón eran parte de esa red de rufianes que decían combatir», recuerda Reynaga.
La situación había llegado a tal extremo que los dueños de hoteles se negaban a alquilar habitaciones a las trabajadoras por miedo a las represalias policíacas y así el trabajo sexual se convirtió en una explotación de poderosos que vivían del trabajo de las mujeres.
Es así que deciden «ocupar esta iglesia considerando que era un lugar donde se las iba a respetar y hacer llegar su protesta a la sociedad de su padecimiento. Estaban rompiendo la muralla del silencio y lograron llamar la atención de los medios de comunicación y el apoyo de la población», cuenta la presidenta de RedTraSex.
La historia tuvo un triste final. A las cinco de la madrugada del 10 de junio de 1975 la policía entró por la fuerza a la iglesia, reprimió de forma brutal a las protestantes e hirió gravemente a muchas de las compañeras. En su momento, nadie denunció la represión.
2005/GM